Avanza en el Concejo el pedido para que se modifique el DNU presidencial
Impulsado por el oficialismo local, fue aprobado por unanimidad en la comisión de Legislación. La oposición advirtió que no se trata de un "capricho" de Alberto Fernández para perjudicar a Mar del Plata.
La comisión de Legislación del Concejo avanzó con un pedido de Juntos por el Cambio para que se revise el último DNU presidencial.
La comisión de Legislación del Concejo Deliberante dio despacho ayer por unanimidad al pedido del oficialismo local para que el presidente Alberto Fernández modifique el último Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que estableció cambios en los parámetros para considerar a una ciudad en “alarma epidemiológica y sanitaria”.
El expediente, impulsado por la radical Vilma Baragiola y suscripto por el interbloque de Juntos por el Cambio, está en línea con los cuestionamientos que el gobierno municipal lanzó a la norma, que fijó dos condiciones para que los distritos de más de 300 mil habitantes asuman las mayores restricciones para evitar la propagación del coronavirus.
La primera es tener un promedio de más de 500 contagios acumulados en los últimos 14 días por 100 mil habitantes. La otra es alcanzar una ocupación de camas de terapia intensiva del 80%. Con uno de los dos parámetros alcanza para estar en “alarma” –lo que deriva en la fase 2 provincial–, cuando el DNU anterior puntualizaba que era necesario solo uno de esos criterios.
Así, General Pueyrredon, que supera la tasa de contagios pero no la ocupación de camas, cayó en la fase 2, lo que implicó, entre otras restricciones, la suspensión de las clases presenciales.
“Entendemos que ha habido un cambio bastante grande en el DNU que bien vale el intento (por modificarlo)”, dijo Angélica González, de la Coalición Cívica, uno de los bloques que integra el interbloque oficialista. “La pandemia es virósica y si seguimos en una situación de tremendo encierro va a ser después las resultantes emocionales que tenga la población”, agregó.
La radical Cristina Coria se pronunció en el mismo sentido al sostener que “el núcleo duro del problema no está en las actividades productivas y educativas que se realizan con protocolo”, por lo que es necesaria “una revisión al tema de las fases” porque “ya de por sí es un tema que muy difícilmente pueda abarcar la realidad de todos los distritos con dos parámetros”.
Marina Santoro, del Frente de Todos, hizo un repaso del contexto epidemiológico y sanitario en que Alberto Fernández firmó el DNU y advirtió que no se trata de “un capricho presidencial” ni responde a “especulaciones políticas”.
“Desde marzo a la fecha hubo un 300% de aumento en la ocupación de camas, la mayor variación que se ha dado en toda la pandemia. Y si vamos al número, han muerto más de 200 vecinos por mes desde el 5 de marzo al 5 de junio”, agregó la opositora.
Ariel Ciano, del Frente Renovador, sostuvo que “nadie puede creer seriamente que, como se esbozó desde el gobierno local, el presidente de la Nación haya modificado el decreto para perjudicar a Mar del Plata”. “Hay otros 121 distritos (de la provincia) que están en la misma condición, la gran mayoría con intendencia del Frente de Todos. Hay que tener una mirada amplia, no somos el ombligo de la Argentina”, reclamó.
Más allá de esos argumentos en contra, el Frente de Todos y el Frente Renovador se abstuvieron en la votación, por lo que el expediente avanzó por unanimidad y será tratado en la sesión prevista para el jueves.