El Colegio de Odontólogos de la Provincia de Buenos Aires Distrito IX y la Defensoría del Pueblo de General Pueyrredon advirtieron este miércoles que en Mar del Plata y la zona crecieron un 20% las denuncias por personas que atienden la salud bucal de pacientes sin contar con el título correspondiente para desempeñar tal actividad.

En el marco de una conferencia de prensa desarrollada en la sede del Colegio de Odontólogos, ubicada en Bolívar 2860, se alertó acerca del “intrusismo” que se registra en el sector.

“El intrusismo es el ejercicio de una determinada profesión por parte de una persona que no tiene el título habilitante para hacerlo, por lo tanto es un ejercicio fraudulento”, explicó el presidente del Colegio de Odontólogos Distrito IX, José Vila, y, si bien reconoció que esto es “algo histórico”, señaló que en los últimos meses desde la institución están “notando que la cantidad de denuncias que llegan han aumentado”.

“En lo que va de 2022 han aumentado un 20% aproximadamente. Esto era más frecuente en Mar del Plata, pero estamos recibiendo denuncias de ciudades en la que antes esto no ocurría. Estamos notando que esto está creciendo”, aseguró Vila en diálogo con LA CAPITAL.

Por su parte, el Defensor del Pueblo, Fernando Rizzi señaló que se encuentran “acompañando al Colegio de Odontólogos en esta cruzada contra el intrusismo, que no es ni más ni menos que poner en riesgo la salud de la población a través de personas que inescrupulosamente realizan tareas que corresponden a un profesional matriculado”.

“Desde el Foro de Colegios Profesionales nos han pedido a la Defensoría del Pueblo el acompañamiento en distintas acciones contra el intrusismo en distintas profesiones y es así que vamos a estar trabajando de acá en adelante con esta temática”, añadió Rizzi, haciendo hincapié en que creen que “es necesario concientizar a la población acerca de los riesgos que esto puede representar sobre la salud de las personas”.

En este marco, Vila señaló que quienes suelen realizar estas acciones odontológicas sin estar matriculados “son personas que pueden tener cierto conocimiento relacionado con la profesión porque son prácticas que, sin generalizar, son llevadas a cabo por los protesistas dentales o pseudoprotesistas dentales”.

“El protesista, o más conocido comúnmente como mecánico dental, es en realidad un auxiliar del odontólogo y no está facultado para trabajar en la boca de los pacientes”, aclaró y remarcó que “tienen cierto conocimiento, pero no están aptos legalmente para hacerlo”.

Frente a este panorama, el presidente del Colegio de Odontólogos lamentó que en la institución recibieron “denuncias de personas que han sufrido un perjuicio producto de este tipo de prácticas”.

“Estas personas acuden a estos servicios, a veces por desconocimiento, y otras veces por cuestiones económicas porque presuponen que es más barato, cuando en realidad no lo es”, enfatizó.

Seguidamente, Vila comentó que la institución que dirige cuenta con “facultades disciplinarias con el odontólogo matriculado”. “Pero en estos casos se trata de personas que no están matriculadas como odontólogo, entonces tenemos serias limitaciones a la hora de poder darle respuesta a estos pacientes que vienen al colegio”, dijo y subrayó que “el organismo de contralor es el Ministerio de Salud”.

Por ello, Rizzi solicitó que “las autoridades pertinentes realicen los controles y las verificaciones necesarias sobre estas personas”. “Básicamente lo que queremos es que la gente sepa en manos de quién deja su salud y en caso de que no tenga un título y realice actividades de odontólogo, denunciarlos”, sostuvo.

Referentes del Colegio de Odontólogos y de la Defensoría del Pueblo brindaron una conferencia de prensa.

Publicidades

En este contexto, Rizzi alertó que se registra “publicidad engañosa y figuras que constituyen un delito, como fingir tener un título que en realidad no se posee o realizar tareas que están determinadas para un profesional, sin serlo”.

“Las redes sociales lamentablemente están inundadas de este tipo de publicidades, que por supuesto que son publicidades fraudulentas”, agregó Vila y brindó algunos tips para determinar cuando se trata de publicaciones de verdaderos profesionales.

“El odontólogo que quiere publicar, y que lo puede hacer, tiene que obligatoriamente por ley publicar su nombre, el título y el número de matrícula”, indicó y agregó que “cuando alguien ve algún tipo de publicación que no consigna esos datos ya es para sospechar”.

Por último, el presidente del Colegio de Odontólogos señaló que “ante una duda, un número de matrícula o un nombre que pueda resultar sospechoso o les parezca raro lo que está viendo, pueden comunicarse con el Colegio de Odontólogos”.

“Pueden dirigirse a la sede de Bolívar 2860, de lunes a viernes de 8 a 16, llamar por teléfono (493-7650) o mandar un mail ([email protected]), con una foto de la publicidad incluso, y consultar. Nosotros en el registro que tenemos podemos corroborar si es una publicidad que está registrada en el colegio o si ese supuesto odontólogo está matriculado o no”, concluyó.