A siete meses de haber visto egresar a los primeros médicos formados en la universidad pública de la ciudad, la Escuela de Medicina acaba de dar otro importante paso en su historia: la incorporación de la especialización en pediatría.

En los últimos días, la Escuela de Medicina de la Universidad Nacional de Mar del Plata sumó una nueva carrera de posgrado, la Especialización Universitaria en Pediatría, que se espera poner en marcha “pronto”, una vez que sea validada por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU).

“La pediatría es la clínica de la tercera parte de la población del mundo, que está constituida por menores de 20 años. Ellos son los que más demandan de los sistemas sanitarios e históricamente, la pediatría o la medicina general eran especialidades muy elegidas por todos los graduados de medicina”, explicó el Doctor Juan Reichenbach, director de la Especialización.

Seguido, vislumbró algunos aspectos que se esperan abordar en la especialización: “Tengo la esperanza de que enfaticemos todos aquellos aspectos olvidados relacionados con el recién nacido de alto riesgo, con sus seguimientos, con la promoción de la salud en lugares para eso específicamente y, fundamentalmente, en la visibilización de las adolescencias que durante muchísimo tiempo fueron un claroscuro en los aspectos de formación académica y de gestión”.

Faltan pediatras

Desde hace un tiempo, se viene planteando dentro del sistema de salud, una “crisis” o insuficiencia en la cantidad de pediatras en actividad, sobre todo luego de la pandemia. La apertura de esta carrera de posgrado, busca revertir esa realidad, que tiene múltiples explicaciones, comenzando por lo económico.

Reichenbach se refirió a la falta de pediatras: “En nuestro país y en varios países de Latinoamérica hay una crisis real por una multiplicidad de factores. Sin duda el más importante es el económico, porque la pediatría es la más humana de las especialidades y exige realmente un gran esfuerzo por parte de los profesionales”.

Sin embargo, el segundo factor que afecta la falta de pediatras es el vocacional. “En una sociedad individualista como la que estamos cursando, la falta de redes y de comunidades, hace que se pierda la visión trascendente que tiene la salud del niño, niña y adolescente en la historia de cada uno de los pueblos y en la historia de un país”, planteó el doctor.

Seguido, agregó: “No hay futuro si no hay niños sanos. A pesar de ello, es decreciente el número de estudiantes que optan por esta especialidad”.

Asimismo, el director de la especialización responsabilizó a las currículas de las carreras por propulsar este problema: “Las currículas hegemónicas han generado una idea de dicotomización del ser humano o el niño, como si estuviera dividido en compartimientos”.

Entonces, destacó la innovación que realizan con la asignatura Salud del niño, niña y adolescente (SANNA): “Un gran porcentaje de las facultades que tienen currículas innovadoras como herramienta de aprendizaje, tienen un mayor porcentaje de estudiantes que optan por la pediatría. Si a eso le agregamos la impronta de una carrera de especialización subsecuente que continúe con la educación de grado, obviamente es trascendente”.

Primeros graduados

La influencia del tipo de formación se pudo ver en las elecciones de los primeros graduados de la Escuela de Medicina. De los 89 egresados, más de 60 han optado por entrar al sistema de residencias. Doce de estos han elegido pediatría.

Adrián Alasino, director de la Escuela de Medicina, destacó ese escenario registrado entre quienes se graduaron en marzo de este año: “Estamos muy conformes, porque claramente queda expresado que el perfil de la escuela sin duda influye en la elección. Más del 60% de nuestros egresados eligió estas especialidades básicas que tienen muchas dificultades para ser cubiertas y creo que parte de eso está en la motivación y en la forma que tiene la escuela de enseñar medicina”.