A días de haber participado del evento Conectados por México, que reunió a más de 70 artistas de distintas partes del mundo, Ana Magiar continúa pasando los días de confinamiento, trabajando en material musical pendiente y gestando colaboraciones con otros artistas.

La referente marplatense del Classical Crossover, con el que triunfó a nivel internacional, confió a LA CAPITAL que el género es “un espejo de mi ser”, en una charla en la que compartió ideas y emociones acerca de su trabajo.

La artista, vinculada “desde siempre” con la música, quien ha pasado por diversos géneros, proyectos solistas y colectivos, piensa en el sonido también como una “estética visual” y así lo plasma tanto en sus vestuarios -algunos de los cuales confecciona ella misma- como en las imágenes de sus videos.

Todavía emocionada por la repercusión del concierto solidario realizado los días 23 y 24 de mayo, en el que compartió streaming con su colega Moon Dust (Finlandia), coproductor musical de su ultimo Álbum Transcendental, confió que prefiere escribir e interpretar letras “que apunten más al ser y sus dimensiones de conciencia”.

– ¿Cómo se dio la posibilidad de participar de la iniciativa Conectados por México?

– Tengo una relación muy linda con México, me he presentado en el Auditorio Nacional (México DF) y también he filmado 2 video clip en las pirámides de la Riviera Maya, para mi último álbum experimental “Transcendental”.
México me ha recibido muy bien y de esta cálida relación nacen continuas invitaciones. Fueron dos días de concierto, debido a la gran participación de artistas latinoamericanos y junto a Moon Dust en vivo entre Argentina y Finlandia interpretamos varias canciones de nuestro último álbum.

– Venís de unos años de bastante movimiento ¿Cómo te encontró y cómo vas llevando este momento de aislamiento obligatorio?

– En este período de aislamiento social obligatorio he aprovechado muchísimo para retomar material musical pendiente, también me encuentro realizando varias entrevistas para medios internacionales y algunas participaciones junto a músicos locales.
Por suerte ¡soy muy optimista! Con la soledad y el silencio me llevo muy bien.

– ¿Podés contar algo de eso en lo que estás trabajando?

– Sí, siempre es lindo trabajar en nuevo material y muy pronto, anunciaré oficialmente en mis redes, nuevos lanzamientos.
Recientemente el maestro Juan Manuel Chazarreta me ha invitado cantar junto a él, una canción del genero Folklore algo que jamás hubiera imaginado y resultó de lo más gratificante, espero pronto a verla terminada, porque es realmente una hermosa composición.

– ¿Hay algunos artistas con quienes te gustaría compartir proyectos?

– Siempre compartir música, criterios, ideas es algo liberador y renovador. Sería perfecto hacerlo junto a Christopher Von Deylen músico Alemán.

– ¿Cómo fue tu encuentro con la música?

– No hay para mí un momento justo que pueda tomar como punto de partida, la música siempre ha sido algo muy presente en mi vida, he cantado a solas, en bandas, en coros y como solista en varios géneros e idiomas y he recorrido los más prestigiosos teatros de mi país he colaborado en música para películas y también me he presentado internacionalmente.

– ¿Qué es lo que te impulsó a estudiar canto lírico?

– La ópera es un género que adopté en mi adolescencia y al cual siempre retorno, estudiar canto lírico me ayudó a liberar y potenciar mi voz.

– ¿Cómo definís el classical crossover y qué te sedujo de él?

– El “classical crossover” es un espejo de mi ser… mi vida es crossover! Un sinónimo del mismo sería absolutamente liberador, como un impulso imperceptible desde la razón pero poderosamente dominador desde la emoción.

– ¿Qué significó para tu vida, tu carrera, el encuentro con Tarja Turunen?

– Mis encuentros con ella, me hacen creer en la magia y causalidad de la vida. Que gracias a la música sucedió. Por otro lado me siento muy identificada en gran parte con su vida, ya que tenemos la misma edad y hemos atravesado momentos musicales similares. Para mí es una hermosa persona, absolutamente inspiradora.

– ¿Cómo llevás, día a día el entrenamiento y el cuidado de tu voz?

– Por suerte no bebo alcohol, tampoco fumo, intento descansar bastante previo a conciertos o ensayos. Pero considero aún más importante preservar la parte emocional y energética, para un buen rendimiento y es justamente ahí, donde prefiero preservar el tiempo y el esfuerzo diario, funciono diferente. Cada quien a su manera.

– ¿Cómo pensás, das forma, a la estética que acompaña tus canciones, el vestuario? Porque hay una combinación de lo auditivo con lo visual.

– Esta es una área que me encanta… pienso en el sonido también como una estética visual y como me considero 100% crossover en mi vida, en el vestuario también lo soy. Mucho de este lo he adquirido de viajes, otros son exclusivos de diseñadores del país y otros tantos me los invento. Mi abuela era modista de alta costura y me enseño a coser a los 6 años.

– ¿Qué te inspira para componer? Hay algo de existencial, de búsqueda filosófica ¿Es así?

– Sí, hay algo existencial detrás de cada letra como bien lo decís una búsqueda filosófica y otras veces, nadie ni nada en particular… Solo la música en sí misma, los instrumentos sugieren un concepto establecido, prefiero escribir letras que apunten más al ser y sus dimensiones de conciencia desde una apertura y acceso más transpersonal, sin división entre lo interno y lo externo, entre yo y el otro.