Por Sebastián Arana

Los empates en casa usualmente se lamentan. No es el caso. Alvarado pudo haber perdido. No jugó bien, fue superado por un rival astuto, siempre fue en desventaja.  Su capacidad de reacción, sin embargo, le permitió alcanzar un esforzado empate en dos goles en la apertura de la tercera fecha de la Zona 1 del Torneo Federal A. Teniendo en cuenta las especiales circunstancias del partido, no estuvo mal.

A Alvarado el partido se le presentó complicado desde el diluvio previo. Y todavía más desde el pitazo inicial de Carlos Córdoba. Villa Mitre fue el adversario rocoso de siempre. Bien parado en el fondo, ordenado, peligroso a la hora de contraatacar.

Un dato es revelador. De los once titulares, los bahienses tenían siete que habían jugado, por lo menos, durante la temporada anterior; en Alvarado, sólo Urquiza y Mantia. La diferencia de trabajo de arrastre pudo advertirse. Villa Mitre, en casi todo momento, se mostró un equipo más coordinado. Sobre todo, para presionar y contraatacar.

Mauricio Giganti sorprendió con una formación bien ofensiva. Con Gentile sobre la derecha, Rodrigo Depetris moviéndose en la zona de Francisco Molina y Nicolás Trecco como compañero de fórmula ofensiva de Emiliano López.

Sin embargo, no pudo desbordar casi nunca. La ausencia de Molina se sintió y mucho. Y, un poco por la cancha rápida, otro poco por la presión visitante, los errores de manejo se multiplicaron.

Villa Mitre estuvo a punto de ponerse en ventaja a los 6’ de manera inaudita. Stefanatto le tiró muy fuerte y a media altura un pase atrás a Degrá. Al arquero se le escurrió la pelota por debajo de sus piernas y, de milagro, se rehizo y despejó sobre la línea del arco.

Tras cartón, Trecco se deshizo de un adversario y, con buen criterio, probó de media distancia. Pero Tavoliere atajó en dos tiempos el venenoso remate.

Villa Mitre, a esa altura, tenía claro su plan. Trabajaba para recuperar la pelota con nueve jugadores de campo, con el refuerzo de Herrera, que bajaba continuamente a darle una mano a sus volantes, y buscaba el pase largo a Tunessi, un delantero con una potencia infernal.

A los 9′ el pelotazo fue preciso, Tunessi la tiró larga para sí, superó una marca y sacó un zurdazo cruzado que explotó en el palo. Maximiliano López, que acompañaba de atrás, le puso el pie al rebote y marcó el 1-0.

Con la desventaja, a Alvarado se le hizo más cuesta arriba todavía. Lo aconsejable era ir por afuera, pero ni Gentile, ni Depetris consiguieron desbordar. Tampoco cuando Giganti los cambió de banda.

Y cada pelotazo a Tunessi encontraba al equipo expuesto. A los 27’ el goleador del último Federal B en Sol de Mayo de Viedma picó de atrás de la mitad de la cancha para reunirse con un pelotazo de Cocciarini. Tiró la gambeta larga para superar la rápida salida de Degrá, pero se abrió demasiado. De todos modos, con el arco ya cubierto por un par de jugadores, sacó un bombazo que pegó en la cabeza de Mantia y se fue al córner.

La solución para todos los problemas de un Alvarado confundido llegó con una pelota parada. A los 40’ la defensa visitante despejó corto un tiro de esquina, Urquiza cruzó un nuevo centro y Depetris, muy libre en el segundo palo, lo conectó de cabeza. Tavoliere manoteó justo, el balón pegó en el palo y Ponce capitalizó el rebote para marcar el 1-1.

Villa Mitre, de todos modos, frenó el impulso local. En el arranque del segundo tiempo, a los 4′, recurrió a su efectiva fórmula para ponerse en ventaja. Herrera sacó un preciso pelotazo del medio hacia la derecha, Tunessi superó en carrera a todos y sacó un derechazo cruzado y violento, inatajable para Degrá. Dos a uno para los bahienses y de nuevo a remar.

Enseguida Tavoliere salvó a los visitantes desviando un remate esquinado de Trecco que se metía junto a su palo derecho. Pero el partido seguía a pedir de los bahienses, que estuvieron a punto de aumentar a los 12’. Sin embargo, Degrá a puro reflejo desvió un cabezazo de Herrera, ubicado a dos pasos de la línea del área chica.
Cuando peor lo pasaba, Alvarado volvió a llegar al empate.

Ponce -mejor atacando que defendiendo- trepó por el lateral izquierdo y buscó el ingreso del “Colo” López por el centro del área. El delantero controló con clase, esquivó el achique de Tavoliere con una gambeta y remató al arco vacío para igualar.

Con imperfecciones, el tramo final se hizo atractivo. Alvarado, obligado, fue a buscar. Pero Villa Mitre, a esa altura consciente de que podía, también intentó ganar.

Degrá, a los 31’, salvó una caída casi segura de su arco, jugándose el físico para tapar una llegada franca de Víctor González, que había ido a buscar un buscapié de Tunessi en un tiro libre jugado con astucia.

Tavoliere, a los 35’, desvió espectacularmente un cabezazo de Mendoza, que había conectado un tiro libre de Bonetto.

A esa altura, el triunfo coqueteaba con los dos. Casi cae del lado de Villa Mitre, a los 45’, cuando Ihitz, remató mal de volea, muy libre, un tiro libre de Maximiliano López.

En definitiva, el empate fue negocio para Alvarado, que jamás se sintió cómodo en el partido. Villa Mitre, con el libreto más claro y el mejor jugador de la cancha, Tunessi, estuvo más cerca.

La síntesis

Alvarado 2
Degrá (7); Urquiza (5), Germán Mendoza (6), Mantia (5) y Fernando Ponce (5); Gaspar Gentile (5), Stefanatto (5), Canuhé (4) y Rodrigo Depetris (5); Emiliano López (6) y Trecco (5). DT: Mauricio Giganti.

Villa Mitre 2
Tavoliere (7); Tanner (5), Manchafico (5), Víctor González (5) e Ihitz (5); Formigo (5), Cocciarini (6), Leonardo López (6) y Maximiliano López (6); Carlos Herrera (6) y Tunessi (8). DT: Carlos Mungo.
Goles: en el primer tiempo, 9’ Maximiliano López y 40’ Ponce; en el segundo tiempo, 4’ Tunessi y 16’ Emiliano López.

Cambios: en el segundo tiempo, 13’ Julián Bonetto (5) por Depetris y Visser (5) por Trecco, 17’ Patricio Escott por Herrera, 36’ Lautaro Villegas por Tunessi y 40’ Matías Caro por Canuhé.

Cancha: Estadio José María Minella (buena).
Arbitro: Carlos Córdoba (7), de la Liga de Santa Fe.