Poniendo en práctica las “alternativas para la vida independiente”, dos alumnos del Centro Recreativo Deportivo Especial (Crede) de la Asociación Deportiva Educativa Regional Marplatense para Discapacitados (Adermad) participaron la semana pasada de un seminario sobre “Liderazgo Atlético Deportivo” que se realizó en Santa Rosa, La Pampa.
Para Marcelo Robles (35 años) y Emanuel Taranto (23 años) fue la primera vez que “viajamos solos y fue una experiencia muy buena”, describieron.
Durante las jornadas de estudio se integraron a los demás participantes de todo el país que dieron vida al encuentro y “nos alojamos en un albergue. Todos los demás chicos trabajan también”, detalló Emanuel.
En la oportunidad, los jóvenes recibieron “capacitación para participar en distintos torneos, en diferentes deportes”, lo que en un futuro puede significar una salida laboral.
La experiencia está enmarcada en “la puesta en práctica de alternativas para la vida independiente, con la que se apunta a cuestiones cotidianas, como es viajar solo en colectivo, manejar su dinero y, en un futuro, irse a vivir solos”, detalló la abogada de Crede, la doctora Paula Benvenuti.
Si bien la letrada explicó que “hay legislación en vigencia que, a personas con cierto grado de discapacidad, los catalogan con plena capacidad jurídica y la idea es integrarlos cada día más”.

En la práctica

Claro que, para que se concrete esa integración, es necesario proveerles “herramientas terapéuticas” para que los jóvenes puedan valerse por sí mismos.
En ese sentido, advirtió que “es fundamental que encuentren salidas laborales. El problema es que, cuando son contratados o se sacan el monotributo, pierden la pensión que les da el Estado, con la cual tampoco no pueden vivir porque no les alcanza”.
Justamente, una de las problemáticas que enfrentan las personas con discapacidad es que, después de cierta edad, se quedan solos por la muerte de su familia y terminan en hogares cuando “de acuerdo a la ley podrían vivir en residencias, con un controlador, pero solos”.
Todo esto está reflejado en la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, que data de 2006 y a la que Argentina adhirió en 2008.
“Se introduce una nueva mirada -advirtió Benvenuti-, es una primera señal de clara del camino a seguir. Todavía falta mucho para que se ponga en práctica”.
Tanto Emanuel como Marcelo concurren a Crede, de lunes a viernes de 9.30 a 16.30, donde realizan diversas actividades y talleres y no descartan conseguir un trabajo en el corto plazo.
Emanuel explicó que “me gusta la informática, me gustaría poder trabajar en algo de eso”, mientras que Marcelo se desempeñó en el rubro gastronómico y manifestó su intención de repetir la experiencia.
Crede está ubicada en Chubut 1731 y se puede requerir más información escribiendo a [email protected]