Más allá del constante crecimiento del predio deportivo y de la apuesta que el club hace por el semillero con la participación de sus seis categorías juveniles en los torneos de AFA, desde comienzos de año Aldosivi encaró una valiosa inversión buscando apuntalar, con la incorporación de ciencia y tecnología el patrimonio futbolístico de la institución.

Aldosivi no solo tiene hoy en día uno de los mejores predios del fútbol argentino. También está a la altura de clubes como Boca, River y las grandes potencias europeas en cuanto a la utilización de herramientas de avanzada para potenciar las cualidades futbolísticas de todos sus jugadores (desde los profesionales a la novena) y achicar el margen de error a futuro.

Para ello, Aldosivi “repatrió” a Gabriel Gómez Stradi, el coordinador del departamento de Metodología del club, que llegó como integrante del cuerpo técnico de Fernando Gago, se fue con el ahora entrenador de Racing Club y volvió en noviembre de 2021 para encabezar este proyecto que requiere de tres años para ver resultados concretos, según manifestó el propio Gómez Stradi en una nota publicada por la web oficial del club portuense (aldosivi.com).

Con más de seis años trabajando el área en River Plate, Gómez Stradi lidera un grupo que componen Thomas Verrina (videoanalista del plantel profesional); Alan Reser (neurociencia), el marplatense Rodrigo Barcia (videonalista de inferiores), el chileno Sebastián Mardones (videoanalista de reserva) y el colombiano Julián Murillo (scouting).

Así, el club le ofrece a cada cuerpo técnico que llega a trabajar a la institución, una valiosa herramienta a través de la cual se podrá en el mercado de pases achicar el margen de error a la hora de buscar refuerzos, corregir defectos colectivos e individuales en el día a día de los actuales planteles, realizar un seguimiento de los futbolistas del club que están a préstamo en otras instituciones y, fundamentalmente, nutrir al equipo profesional de jóvenes valores propios que lleguen mejor plantados a la primera división.

“La idea de todo esto es que el club no tenga que traer quince refuerzos en cada mercado de pases, que tenga una base sólida de jugadores propios formados en las inferiores y que busque apuntalarlos con 4 o 5 refuerzos”, señala Gómez Stradi, quien para su formación se adentró en el mundo de la inteligencia artificial y visitó clubes como Roma, La Masía de Barcelona o la selección española para ver cómo utilizaban en Europa estas herramientas.

Ingresar unos minutos a la sala de este equipo de trabajo no hace más que provocar la fascinación del privilegiado de turno (no cualquiera puede hacerlo) por los datos que allí se almacenan, estudian y procesan.

Desde el plantel de la novena división de AFA hasta los dirigidos por Fernando Quiroz tienen un perfil detallado de sus actuaciones, características, fortalezas y puntos a trabajar.

En dicho laboratorio se analiza todo. Ningún detalle queda librado al azar. Posicionamiento con o sin pelota, pases, control orientado, definiciones, despejes, pelotas paradas. Con apretar un botón uno puede observar al instante las salidas desde el fondo de un defensor central en el lapso de tiempo deseado (último partido, 5 o 10 cotejos hacia atrás). Con la estadística de ese conjunto de decisiones que tomó el jugador y con la imagen de video de cada una para respaldar los números.

Alan, responsable de neurociencia, trabaja periódicamente en tres escenarios disponibles en el predio buscando agilizar la toma de decisiones y la repentización de los jóvenes futbolistas. Y lo hace con un equipamiento que el club acaba de adquirir que, en Argentina, solo lo tiene River Plate.

El departamento que encabeza Gómez Stradi no solo repara en números y estadísticas. También se ha forjado un vínculo con las áreas de psicología y nutrición para ampliar el espectro de cada perfil de jugador. La interacción entre áreas ha permitido realizar talleres y cursos para los chicos y también extraer información útil a la hora de decidir, por ejemplo, qué jugador puede requerir una contención extra o bien el cobijo que significa la pensión del club.

En ese marco, la Secretaría Técnica elaboró un minucioso Manual de Procedimiento que quedará en el club (más allá de las personas que trabajen en cada ciclo y en cada área), que incluye neurociencia (fundamentos teóricos, metodología cognitiva y conceptos a implementar), video análisis (fundamentos teóricos, proceso de datos), psicología (fundamentos teóricos, proceso de iniciación), preparación física (evaluaciones y cargas de entrenamiento), nutrición, fisioterapia y metodología de juego.

Hoy, con esta costosa inversión que encaró Aldosivi en 2022, el club se dedicó a sembrar. En un mediano plazo podrá comenzar a cosechar el valioso aporte de estas herramientas de ciencia y tecnología que sin dudas potenciarán las cualidades de cada jugador dentro y fuera de una cancha.