En las últimas semanas, las estaciones de servicio en Mar del Plata, al igual que en otras partes del país, han comenzado a experimentar una serie de faltantes “intermitentes” de diversos tipos de combustibles, según advierte la Cámara de Expendedores.

Esta problemática se ha vuelto más evidente tras la decisión del Gobierno de congelar los precios de los combustibles, lo que llevó a las petroleras a establecer restricciones en la entrega de nafta y gasoil, generando dificultades para mantener el abastecimiento normal a los consumidores.

Patricio Delfino, miembro de la Cámara de Expendedores de Combustibles en la ciudad, destacó que en Mar del Plata “se registran faltantes de nafta súper y gasoil común”, y que la situación “es complicada en general”.

Estos faltantes se han vuelto “intermitentes” debido a que el mercado se ha visto notablemente desordenado, especialmente después de las elecciones primarias (PASO) y la devaluación que le siguió.

A pesar de que los aumentos de precios en el canal minorista rondaron el 12%, en el canal mayorista, la devaluación ha tenido un impacto más significativo, con aumentos de más del 20% en los precios básicos de los combustibles en el último mes.

En consecuencia, “todas las marcas han implementado cupos para sus operadores”, y aunque los volúmenes establecidos son considerados “razonables”, algunas estaciones de servicio en la ciudad, especialmente de la red YPF, que mantiene precios más bajos, están sufriendo faltantes de combustibles, alertó Delfino.

En consecuencia, cuando se termina ese cupo, falta combustible y los clientes deben recorrer la ciudad para encontrar otra estación de servicio que tenga stock.

Además, se ha observado una marcada divergencia de precios entre YPF y sus competidoras. Por ejemplo, mientras YPF vende el gasoil a $306, otras competidoras lo ofrecen a $318, y en algunas marcas el valor alcanza los $360.

Este desequilibrio de precios ha contribuido a la percepción de “un mercado desordenado” y genera preocupación e incertidumbre entre los operadores de estaciones de servicio.

“Vemos un mercado muy desordenado y si bien hubo un congelamiento de precios, el resto de las marcas continuaron haciendo retoques en los precios”, agregó el referente local de la Cámara de Expendedores de Combustibles.

El congelamiento en los precios de los combustibles que el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció el mes pasado, tendrá vigencia hasta el 31 de octubre próximo.

El congelamiento de combustibles tuvo un doble objetivo: por un lado, evitar el impacto directo en el bolsillo de los ciudadanos; por otro lado, frenar el traslado a precios que supondría un incremento en el costo del transporte en la cadena de suministros de la economía.

Sin embargo, según Delfino, las estaciones de servicio “la están pasando mal” y han quedado “muy atrás” respecto a la inflación. Por el momento, los faltantes de nafta y gasoil común se presentan intermitentemente, pero no descartan que la situación se agrave.

Consumo

En simultáneo a este escenario, en el último tiempo “ha aumentado la demanda en las estaciones de servicio”, aunque buena parte de los consumidores ha variado el tipo de combustibles que compra para sus vehículos.

Lo que se viene observando en las estaciones de servicio es que muchos conductores pasaron de elegir los combustibles premium y se inclinaron por la falta o el gasoil común, debido a los precios.

A su vez, la gente espera y aprovecha las promociones que las estaciones de servicio y entidades bancarias aplican para días determinados, con la intención de cuidar más el bolsillo.