Por Grupo Francisco (*)

Hace 50 años, el 11 de mayo de 1974, era asesinado el padre Carlos Mugica al salir de rezar Misa en la Parroquia “San Francisco Solano” de Villa Luro. Carlos tenía 43 años. Lo recordamos y, también, reflexionamos sobre su vida, su testimonio y el significado para el hoy.

Carlos Mugica había sido ordenado sacerdote en 1967 y, como él mismo decía, era hijo de un tiempo del mundo en profundo cambio y de la Iglesia marcado por las conclusiones del Concilio Vaticano II, de los Documentos de Medellín del Episcopado Latinoamericano y de San Miguel de los Obispos argentinos.

Era hijo de una familia aristocrática y ejerció su sacerdocio entre los más pobres, allí en la Villa 31 de Retiro donde había sido nombrado párroco de la Capilla Cristo Obrero. También asesoró a los jóvenes que realizaban misiones en el chaco santafesino y su enorme carisma lo tuvo como interlocutor de todas aquellas personas de buena voluntad que quisieran vivir en un mundo mejor y de los medios de comunicación social.

Recordamos a Carlos Mugica por su viaje en el avión que trajo de regreso al Gral. Perón el 17 de noviembre de 1972. Ese lugar público llevaba consigo su identificación con los pobres, con los que menos tienen y sufren, con el pueblo, Junto al Movimientos de Sacerdotes para el Tercer Mundo, vivió y testimonió la opción por los pobres como criterio central de sus vidas.

El Grupo Francisco, integrado por laicos y laicas que actuamos en los ámbitos políticos, sindicales y sociales y que nos inspiramos en el pensamiento y el testimonio del Papa Francisco, nos reunimos para recordar al Padre Carlos Mugica, a quien consideramos mártir, rezamos por su eterno descanso y asumimos el desafío de vivir nuestra fe en la línea del compromiso político que nos legó el querido Carlos.

Nuestra evocación quiere traer al presente a la persona, al sacerdote y al militante: a un compañero que se la jugó hasta dejar la vida y perderla detrás de balas cobardes, oscuras y asesinas.

El Padre Carlos Mugica nos dejó un vector claro para vivir y seguir construyendo la síntesis entre cristianismo y peronismo:  reivindicando la política como herramienta de transformación, asumiendo en el día a día los valores del Evangelio de Jesús y militando el peronismo como sentimiento, como proyecto de vida en común y como paradigma político desde, junto y por el pueblo.

Nosotros, Grupo Francisco, actuamos en Mar del Plata y Batán, hoy más que nunca volvemos sobre el ser y el quehacer de Carlos Mugica, lo asumimos como bandera y profundizamos nuestro compromiso por un proyecto de ciudad que merezca ser vivida en justicia social, solidaridad y desarrollo.

(*) Grupo Francisco está formado por laicos que actúan en los ámbitos políticos, sindicales y sociales y se inspiran en el pensamiento y el testimonio del Papa Francisco.