El diputado provincial Rodolfo Manino Iriart expresó su preocupación por la “aparente persecución política de parte de las autoridades municipales contra un empresario”, en relación con la clausura preventiva del Hermitage Hotel.
“Para gobernar por el bien común de todos los habitantes, se deben dejar de lado los problemas personales. Y mucho menos se debe convertirlos en una batalla, o en una guerra, según la definición del intendente municipal. La política y la gestión no pueden ser entendidos en esos términos”, indicó. “Mar del Plata quiere vivir en paz y no en un clima de confrontación al que pareciera que se lo quiere llevar “, agregó.
“No estamos en contra de las inspecciones ni que se sancione a quienes incumplen las reglamentaciones, pero en este caso parece desprolijo y excesivo. Lo ocurrido hoy se suma a otros operativos ocurridos en las últimas semanas, por ejemplo en el NH Hotel Provincial, que apuntan al mismo destinatario”, lamentó.
Según Iriart, mientras todo esto ocurre “a los ciudadanos les sigue preocupando otros temas como la seguridad, el mal estado de las calles, la salud pública o la falta de orden en el tránsito”.
“El gobierno tiene mucho por resolver, empezando por designar a funcionarios en áreas claves que hoy se encuentran acéfalas y en algunos casos sin funcionamiento”, marcó.
Luego apuntó: “El intendente va encontrar en mí una persona para colaborar, ya lo he dicho públicamente, pero esto no impide que uno pueda marcar lo que no está de acuerdo. He pedido reuniones con el jefe comunal, con la gobernadora y con autoridades de diputados y senadores para expresarles mi preocupación sobre el tema”.

Acción Marplatense

El bloque de concejales de Acción Marplatense advirtió que la clausura preventiva del Hermitage Hotel forma parte de un uso persecutorio del Estado.
“Estamos frente a un caso de utilización de la fuerza del Estado con fines políticos persecutorios, con un gobierno que no puede salir de la propia crisis que se autogeneran”, lanzó.
“El intendente Arroyo le quiere hacer creer a los marplatenses que van a vivir mejor, más seguros y con más trabajo si se embarcan en las guerras imaginarias que él se inventa, y que entre sus últimos capítulos está la clausura de un hotel”, afirmó.
El concejal Héctor Rosso fue más allá de este caso y apuntó: “Nos encontramos en una etapa donde la política del municipio se ha vuelto incomprensible, pueril, rencorosa, menor y desorientada. El intendente se caracteriza por realizar expresiones altisonantes en términos castrenses, donde se inventan supuestas operaciones militares”.
A su entender, “las manifestaciones del intendente están repletas de términos totalitarios cuando todavía no se aclara y no se deslinda la responsabilidad y los contactos de miembros del actual gobierno municipal con varios de los detenidos de los grupos neonazis”.
“Cambiemos quiere una democracia a medida, celebrante, laudatoria. Si no, te clausura”, completó.

Lucas Fiorini

El concejal del Frente Renovador, Lucas Fiorini, consideró que la clausura preventiva del Hermitage Hotel no “debe ser usada para tapar otros problemas de gestión”.
“Espero que esta no sea una persecución, el intendente fue electo para solucionar los problemas de la ciudad”, indicó.
El edil dijo que quiere “interiorizarse” para saber “el motivo real de la clausura”. “Queremos creer que no es esto una consecuencia de una pelea que puede haber entre distintos actores de la ciudad, porque entonces se convertiría en una persecución”.
Fiorini se mostró preocupado. “El tema acá es que el intendente ha sido electo para solucionar los problemas de la gente, no para estar ocupado en determinadas peleas, ni para que esto sea utilizado para tapar problemas o ausencias de gestión”.