El robo de una camioneta y su recuperación permitieron dar con un taller clandestino en donde se desguazaban automóviles para luego ingresar las autopartes en el mercado ilegal.

El procedimiento fue realizado por personal de la DDI Mar del Plata y resultó de la continuidad de una investigación que se había acelerado el martes tras el hallazgo, con persecución incluida, de una camioneta sustraída en los últimos días.

Un varón y una mujer de apenas de 19 y 20 años fueron aprehendidos en el lugar, pero está claro para la fiscal Lorena Hirigoyen y para la policía que no son los responsables de lo que sucedía en ese domicilio del barrio Jorge Newbery. De hecho, la joven quedó en libertad, mientras que el otro aprehendido deberá responder por el encubrimiento, aunque su permanencia en prisión obedece a que se halló un arma en el allanamiento, tenencia ilegal que también afronta como cargo penal.

La problemática del robo automotor y la impunidad con la que se mueven decenas de personas en toda la ciudad para ser parte del millonario negocio quedó en evidencia durante estos operativos, que no fueron sino la continuación de lo sucedido el pasado martes, cuando la policía interceptó una camioneta Chery Tiggo que tenía colocadas patentes de un antiguo Ford Taunus.

Esa camioneta había sido robada el 20 de noviembre en Daprotis al 5900 durante una entradera y el personal policial la localizó en otro sector de la ciudad, en el barrio Rosa de Lima, en la periferia oeste. Hasta allí llegaron los investigadores gracias a un trabajo de seguimiento en cámaras de seguridad, con videos captados tras el robo.

El martes último la policía avistó a la camioneta en Carrillo y Alberti, donde detuvo a su conductor que había intentado escapar poco antes. Precisamente, el personal de la DDI había visto salir la camioneta de un domicilio de Ecuador al 3100 y en otro de Canadá al 3000, ambos del barrio Jorge Newbery, a poca distancia de donde fue finalmente la detención.

Frente a esto, se hizo una rápida tarea de inteligencia y se estableció que allí funcionaban los desarmaderos donde iban a parar los autos robados. Incluso ese iba a ser el destino final de la Chevrolet Tiggo, aunque mientras “esperaba turno” para el desarme le habían colocado otra patente para que pudiera circular sin llamar la atención.

Finalmente en la tarde del jueves la justicia de garantías habilitó el allanamiento para los dos domicilios investigados y se pudo dar con una gran cantidad de autopartes, vehículos desarmados y herramientas para esas tareas.

Se hallaron las dos patentes de la Chery Tiggo, otras patentes pertenecientes a un Chevrolet Corsa, un VW Gol que había sido robado el 31 de octubre, un Fiat Idea robado el 25 de septiembre, un Chevrolet Corsa sustraído el 30 de octubre, dos puertas delanteras, capot, todo con el grabado de números identificatorio suprimido, asiento delantero, asiento trasero correspondientes a un Fiat Idea; tablero e instrumental, un motor aire acondicionado y gran cantidad de autopartes. Había herramientas para la faena mecánica y una carabina calibre 22LR con cargador, una escopeta calibre 20; 2 cartuchos 44 y una vaina servida calibre 22LR.

Las dos personas jóvenes que estaban en ambos domicilios fueron aprehendidas, a la vez que se informó la profundización de las averiguaciones para poder dar con los verdaderos responsables y personas vinculadas a esta organización.