Un adolescente de 17 años lucha por su vida en el Hospital interzonal General de Agudos (HIGA) luego de ser baleado por un amigo mientras manipulaba un arma de fuego dentro de una vivienda del barrio Santa Rosa de Lima.

El trágico episodio tiene un costado más profundo aún, ya que la víctima, Dylan Hageleit, estaba junto a su novia, que a su vez es la hermana de la novia de quien efectuó el disparo. Y además de eso, el revólver pertenecía a un familiar.

Si bien el hecho ocurrió el sábado al mediodía, recién tomó estado público en las últimas horas cuando se conoció una publicación de la EES N°6, establecimiento escolar al que concurrían todos los protagonistas.

“La escuela tiene en este momento dos estudiantes atravesando situaciones muy difíciles, y por ende sus familias y entorno cercano. Dylan de 5to 5ta. se encuentra internado en el Hospital Regional en grave estado. El sábado al mediodía mientras preparaban la mudanza encontraron un arma, que en una situación de juego inconsciente produjo que Ivan de 4to 6ta, provocará el disparo debajo de la costilla de su mejor amigo. Sus novias, con las que convivían, también son estudiantes de la escuela”, señaló el comunicado de la escuela.

En verdad según se desprende del expediente que tramita el fiscal de menores Walter Martínez Soto, la secuencia se inició pasadas las 12.45 del sábado en una casa de Carrillo al 2300, donde los dos varones de 17 años estaban junto a sus dos novias, que a su vez son hermanas. En esas circunstancias Iván tomó un revólver calibre 38 que estaba en un mueble y lo accionó de manera accidental, con tanta mala fortuna que el proyectil impactó en el tórax de Dylan.

De inmediato fue convocada la policía a través del 911 y también una ambulancia del SAME, que trasladó de urgencia al adolescente hasta el HIGA, donde ingresó en estado delicado. El joven que había disparado no estaba en el lugar cuando arribó la policía, pero regresó poco después con su madre y se puso a disposición de la Justicia de Menores.

Quien intervino fue el fiscal Walter Martínez Soto en un expediente que se caratuló de manera inicial como lesiones agravadas por el uso de arma de fuego. Ambos hermanos, tanto el joven que disparó como la novia del herido, fueron aprehendidos, aunque tiempo después los dos quedaron en libertad tras confirmarse cómo se habían sucedidos los hechos.

“Equipo de Conducción y preceptoras del Turno Vespertino estuvieron acompañando con mensajes y personalmente en el Hospital, poniéndose en conocimiento y a disposición de la familia”, informó la escuela a la comunidad educativa.

La comisaría decimosegunda, con jurisdicción en el lugar de los hechos, llevó adelante las actuaciones y secuestró el revólver. Las pericias determinaron que había una falla en el martillo percutor.