“Después de 15 años, si la Justicia acepta revisar la sentencia, que para mí avergüenza al poder judicial de Mar del Plata, es por tenacidad y perseverancia. Acá no hubo influencia. Quien ostentó influencias fue otra persona, que trabajó para el Estado, que logró la condena de tres inocentes y cobró más de 6 millones en diciembre de 2015”, dijo Patricia Perelló, la defensora de los tres policías condenados.

La audiencia del próximo 16 de febrero es algo así como un “minijuicio” ante el tribunal de Casación de La Plata, donde se analizará la nueva prueba incorporada por la defensa. Se trata de siete testimonios que permitirán a los jueces tres opciones: rechazar la prueba y sostener la sentencia, revocar la condena y absolver a los policías, o revocar y solicitar un nuevo juicio.

Perelló desde hace años sostiene que los tres policías son inocentes y que la presión social y política de aquel momento los terminó por condenar. “Son testimonios muy importantes, son nuevos y fundamentales para mostrar que fue armado, todo una mentira, que se dictó una sentencia que avergüenza a la justicia de Mar del Plata. Mucha gente del poder judicial de Mar del Plata lo sabe”, dijo.

También aseguró que “hoy el código de procedimiento prohíbe que haya testimonios de identidad reservada durante el juicio. Sin embargo a los tres policías se los condenó con 13 testigos de identidad reservada. Antes el código lo permitía pero ningún juez lo aceptaba. Acá se armó todo en torno a esos testimonios. Creemos que esta va a ser la primera vez que Anselmini, Suárez y Echenique que reciban justicia”.