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Policiales 20 de septiembre de 2024

Un narco boliviano fue detenido en Mar del Plata: identidades falsas, amantes y el secuestro de una banda rosarina

Darwin Alarcón Carreño (40) tenía captura internacional y figuraba con alerta roja de Interpol. La Justicia Federal de Mar del Plata lo imputó por lavado de activo. La policía lo encontró luego de que una mujer denunciara que habían secuestrado a su pareja, Alejandro Camaño, uno de los nombres falsos que utilizaba Carreño.

Alejandro Camaño está en pareja con una mujer llamada C.. Fernando Matías Villagrán Castillo está casado con J.. Y Darwin Alarcón Carreño es un narco con pedido de captura internacional, con alerta roja de Interpol por lavado de activo. Tienen en común que son hombres de nacionalidad boliviana, tienen 40 años, viven en Mar del Plata y que son la misma persona.

Darwin Alarcón Carreño (40) es uno de los narcos más buscados por la Justicia Federal de Mar del Plata y el juez Santiago Inchausti había solicitado el 9 de junio del 2023 su captura por el delito de lavado de activo, es decir por ingresar al sistema legal dinero proveniente del narcotráfico. Sin embargo, la detención de Carreño no estuvo vinculada al tráfico de droga o un delito similar, si no más bien a su doble vida: tenía dos parejas, utilizaba dos nombres falsos y su amante denunció que lo había secuestrado una banda de Rosario.

El miércoles, una mujer se presentó en la comisaría segunda (Castelli al 2000) para denunciar que habían secuestrado a su pareja: Alejandro Camaño. La mujer, llamada C., explicó que había hablado por última vez con el nombre por Whatsapp a las 21.27 y habían quedado en encontrarse en su casa. Sin embargo, al no encontrarlo allí lo llamó al celular y al tercer intentó una voz masculina le atendió: “Lo tenemos, juntá plata y alahajas, sabemos que tenés un Maverick, somos de Rosario”.

Los secuestradores no dieron más información y tras presentar la denuncia, los policías llamaron a la Justicia Federal ante el posible secuestro extorsivo y fueron con la víctima a la guardia de la Dirección Departamental de Investigaciones, donde se activó el protocolo de rigor para estos casos.

A las 3.23 de la madrugada del jueves, un llamado al 911 alertó a la policía que un hombre deambulaba con las manos precintadas a su espalda por calle 435 y Colectora de Playa Serena, por lo que personal del Comando de Patrullas fue hasta el lugar.

Al llegar la policía, el hombre se presentó como Fernando Matías Villagrán Castillo, de nacionalidad boliviana y con su documentación encima para constatar su identidad. El hombre explicó que la mujer que hizo la denuncia es su amante, que como lleva una dobla vida le había dicho que su nombre era Alejandro Camaño, pero que su pareja legal, su esposa, se llama J..

El hombre narró que había sido interceptado en Castelli y La Rioja por varios sujetos, quienes le taparon los ojos con un cuello de tela, lo golpearon y lo obligaron a subir a un vehículo, una camioneta según explicó la víctima por el ruido que hacía el motor. Además, denunció que le robaron la mochila, el teléfono -que dijo no recordar cuál era su número- y 200.000 pesos. Dijo que no le quitaron su documento boliviano ni el registro de conducir, que efectivamente tenía en sus bolsillos.

Para los policías la narración de Villagrán Castillo (o Alejandro Camaño) fue, cuanto menos, dubitativa. En las pericias no se encontraron lesiones en la víctima contestes con los golpes que dijo haber sufrido y, además, los investigadores solicitaron el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona y que se le tome declaración a la otra pareja del hombre.


La identificación de uno de los narcos más buscados


Ante el aumento en la inconsistencia de los relatos de Villagrán Castillo, en cuanto al horario que ocurrió el secuestro, la forma y el lugar dónde sucedió, los policías de la Dirección Departamental de Investigaciones pudieron establecer que la verdadera identidad del hombre era la de Darwin Alarcón Carreño, un hombre de nacionalidad boliviana de 40 años que es de los narcos más buscados de Mar del Plata, con captura activa internacional pedida por el juez Santiago Inchausti y alerta roja de Interpol.

Según explicaron diversas fuentes judiciales consultadas por LA CAPITAL, Carreño es un hombre buscado por lavado de activo y parte de un clan familiar de la comunidad boliviana vinculado al narcotráfico: su pareja fue procesada por lavado de activo y espera su juicio en el Tribunal Federal de Mar del Plata y otros miembros de su familia están imputados por tráfico y venta de droga.

Al confirmarse la identidad de la víctima, desde la Justicia Federal ordenaron su inmediata detención y que se realicen actuaciones por separado: una en la que figura como víctima de secuestro extorsivo, que de comprobarse que no fue tal podría quedar imputado por “falsa denuncia”; y otra en la que el hombre está acusado de ser parte de una banda narco.

Además se supo que Carreño posee diversos viajes a Bolivia entre 2013 y 2018, que podrían estar vinculados con los delitos que se le atribuyen. Según declaró en la frontera, los propósitos fueron “Transito Vecinal Fronterizo” o “Residente Transito Turista”. En sus viajes utilizó el paso fronterizo Salvador Mazza, de Salta y en una oportunidad, en 2015, lo hizo en una embarcación particular en “Puerto Chalanas”.

Carreño quedó detenido e incomunicado por orden de la Justicia Federal en la sede de la División Antidrogas de la Policía Federal de Mar del Plata. Además de la imputación por lavado de activo que tenía, se le atribuyó el delito de utilizar cédula de identidad boliviana y registro de conducir boliviano apócrifos.

Alejandro Camaño, Fernando Matías Villagrán Castillo y Darwin Alarcón Carreño son la misma persona: un hombre de nacionalidad boliviana de 40 años acusado por lavado de activo que se encuentra detenido, quien deberá dar explicaciones a la Justicia Federal y, tal vez, a sus dos parejas por su doble vida.