Un policía fue condenado a la pena de 6 años y 8 meses por haber simulado la realización de un allanamiento con el objetivo de asaltar, junto a tres cómplices, a una familia en octubre de 2021.

Se trata del excapitán Fabio Oscar Melgar, quien estará detenido hasta el 20 de agosto de 2028 luego de aceptar un acuerdo con la fiscalía y recibir la sentencia durante un juicio abreviado que se llevó a cabo en la sala del Tribunal Oral Nº 3.

El juez Juan Manuel Sueyro condenó entonces a Melgar como coautor penalmente responsable de los delitos de “privación ilegítima de la libertad agravada por simular orden de autoridad pública” y “robo agravado por su comisión en lugar poblado y en banda”, “por el uso de arma de fuego sin aptitud funcional acreditada” y “por el carácter de funcionario policial, en concurso real”.

Por el mismo hecho, en junio de 2023 había sido sentenciado otro policía, Maximiliano Miguel Betancor, quien recibió una pena de 4 años y 3 meses de prisión también en un juicio abreviado desarrollado en el Tribunal N° 2.
En tanto, otros dos hombres siguen sin haber sido identificados en el marco de la investigación, que llevó a cabo el fiscal Mariano Moyano.

El caso se produjo el sábado 30 de octubre de 2021 por la mañana, cuando un hombre fue hasta la estación de servicios de al ruta 88 y Solís a retirar su camioneta marca Ford Ranger. En ese contexto, se le acercó un policía uniformado acompañado de otros dos hombres y le ordenaron regresar a su domicilio porque allí se iba a efectuar un allanamiento.

Posteriormente, los análisis de las imágenes tomadas por la cámaras de seguridad de la zona mostrarían que a poca distancia de ese sitio aguardaba el móvil del Servicio de Custodia y Traslado de Detenidos.

El dueño de la camioneta pidió por la presencia de un fiscal pero le respondieron que la autoridad judicial se dirigía hacia su casa. Sin alternativa, el hombre abordó su rodado junto a dos de los supuestos policías y, acompañado por el móvil de la fuerza y otro vehículo marca 206, retornó a su vivienda de 12 de Octubre al 9300.

Al llegar a la vivienda, los delincuentes fueron recibidos por la pareja de la víctima, a quien le dijeron que tenían una orden de allanamiento e ingresaron.

Las víctimas en ningún momento vieron la orden de allanamiento y las dudas que tenían se despejaron en el momento en que los policías los esposaron y los ataron a ambos con prendes de vestir. Acto seguido se pusieron a revisar la casa para robarles.

Luego de unos 40 minutos, en los que los amenazaron de muerte, los delincuentes vestidos de policías se fueron tras robarles unos 2.000.000 de pesos, celulares y otros objetos de valor.

Las víctimas luego dijeron que comenzaron a asustarse cuando entendieron que estos policías sabían todo de ellas, sus nombres, movimientos y actividades comerciales. “Me dijeron que me quedara quito porque me iban a pegar un tiro”, diría el hombre luego en su declaración.

El dinero sustraído, según denunciaron los damnificados, eran parte de un préstamo recibido para pagar el tratamiento oncológico de su hijo.

Tras esa denuncia, distintas averiguaciones permitieron al fiscal Moyano identificar a Bentancor como el conductor de la camioneta policial y a Melgar como el otro individuo que llevaba uniforme. En tanto, las identidades de los otros dos hombres aún se desconocen.

Cercado por los pesquisas, Bentancor se presentó en la comisaría decimosexta en noviembre, mientras que al día siguiente la Justicia de Garantías autorizó el allanamiento de la casa de Melgar y su detención. A pesar de ello, este excapitán que tenía su domicilio de residencia en Mar del Plata, cumplía funciones en la delegación de control de tráfico de drogas de Chascomús. En ese marco, decidió entregar en la localidad Lezama, en diciembre.