Asalto a un fotógrafo en Camet: se llevaron su auto, salió a buscarlo por los barrios y lo recuperó
Matías Feliz se disponía a hacer un trabajo con una modelo en el Parque, cuando el domingo a la tarde tres delincuentes lo sorprendieron y le robaron el vehículo, la cámara y sus equipos, además de su billetera con documentación. Por la noche, y después de buscar el rodado por varias horas, lo halló en Cataluña y Arturo Alió.
No fue una aventura la de este fotógrafo ni tampoco fue en La Plata, como podría haberlo imaginado el célebre escritor Adolfo Bioy Casares. Más bien, se trató de una pesadilla y le ocurrió en Mar del Plata a Matías Feliz, cuando se disponía a retratar a una modelo en el Parque Camet: en plena tarde, fría pero de sol, tres delincuentes lo asaltaron y se llevaron su cámara, los equipos complementarios, su teléfono celular y su automóvil.
El caso comenzó alrededor de las 15.30, cuando el trabajador arribó un sector del mencionado predio local junto a la joven y a su madre, que llevaba consigo una cartera y un bolso que contenía ropa. Los tres habían planeado realizar una sesión fotográfica para lograr imágenes que se incluyeran en el book de la mujer. Sin embargo, sus objetivos se vieron gravemente afectados con la aparición de los ladrones.
Tenían, contó Feliz a LA CAPITAL, entre 25 y 30 años y ni siquiera se molestaron en ocultar sus rostros. Casi sin mediar palabra, se abalanzaron sobre él y lo obligaron a entregar su teléfono celular, la cámara que llevaba colgada del cuello, los artefactos complementarios para su funcionamiento y las llaves de su vehículo marca Fiat Palio de color gris. “No puedo asegurar si tenían armas o no, pero uno me señaló la cintura y me mostró algo debajo de la campera. Tampoco podría reconocerlos a ellos del susto que me llevé, me olvidé de sus caras”, indicó el hombre.
La madre de la modelo también fue víctima de los delincuentes, que le sustrajeron el bolso y la cartera con documentación. Luego, escaparon en el rodado del fotógrafo, en el que además estaba su billetera con dinero, tarjetas y sus elementos de identificación personal.
“Yo había llegado por la entrada de Tejedor y estacionado el auto pasando el laguito… A 20 metros había una pareja de adultos mayores tomando mate y paseando el perro. Hacía frío pero estaba soleado, por lo que había gente”, agregó Feliz en diálogo con este medio, y aún sorprendido por el contexto en el que se produjo el violento robo.
Acto seguido, los jubilados que habían sido testigos de la situación le prestaron un teléfono, con el que llamó a la policía de inmediato. Posteriormente, fue conducido al Destacamento Camet, ubicado adentro del Parque y dependiente de la comisaría decimoquinta -con jurisdicción en la zona- para hacer la denuncia formal. Sin embargo, el fotógrafo no iba a quedarse de brazos cruzados.
La búsqueda y el hallazgo
Feliz, su padre y su madre decidieron salir a recorrer las inmediaciones del sitio donde se había producido el asalto. Los hombres en una camioneta y la mujer en el automóvil inspeccionaron los barrios Parque Peña y Fray Luis Beltrán. Se sumaron también, y por momentos, dos patrulleros, pero no tuvieron éxito.
Ya desilusionada y al anochecer, la familia consideró que lo más prudente era regresar a su vivienda. Y fue entonces cuando, en medio del último trayecto, Feliz avistó un automóvil idéntico al suyo. “Cuando volvíamos por Alio y Cataluña lo vi. Estaba estacionado sobre Cataluña y era igualito, así que le dije a mi papá que diera la vuelta manzana y me bajé a examinarlo bien”, relató.
Al Fiat Palio le habían cambiado la patente trasera y la delantera directamente no estaba. El fotógrafo llamó a la policía nuevamente y un escuadrón de la comisaría séptima se presentó en el lugar. Después, hicieron lo propio peritos de la Policía Científica, que con el juego de llaves alternativo de la víctima abrieron el rodado e intentaron levantar huellas dactilares de su interior, donde por supuesto no se hallaba ninguno de los artefactos ni los objetos sustraídos por los delincuentes. Tampoco la rueda de auxilio.
Finalmente, y ya de madrugada, Feliz se fue de allí a bordo de su Fiat Palio. Llegó a su casa pasadas las 2.30 de la mañana y ya con intenciones de iniciar, el lunes, la búsqueda de su preciada cámara fotográfica.
Ese operativo, que aún no tiene resultados, empezó con una publicación en sus redes sociales. “Hola soy Matías Feliz, fotógrafo de la ciudad de Mar del Plata. El domingo 23 de Junio siendo las 15:30 hs en el Parque Camet junto a una modelo y la madre, me encontraba desciendo del auto cuando 3 masculinos que venían caminando se acercaron, me increparon y me asaltaron. Me pidieron la llave del auto, la cámara fotográfica que la tenía colgada y a la madre de la modelo le robaron la cartera con toda la documentación. Se subieron a mi auto y se fueron”, describió.
Y, a continuación, enumeró los objetos que le fueron sustraídos y que intenta recobrar, acompañados por sus respectivas imágenes para un eventual reconocimiento: cámara Nikon D3100, lente Nikon 18-55, kente Nikon 55-200, lente Nikon 35 mm, cargador original Nikon y sus dos baterías, flash Triopo TR 950, emisor y receptor Visico, teléfono celular Motorola G20, documentación a su nombre y bolsos con ropa de la modelo.
“En caso de tener algún dato me pueden contactar al 223-5936659 o en las redes sociales @matiasfeliz.fotografia“, subrayó. De acuerdo al cálculo de los costos de cada uno de dichos artefactos, el botín podría rondar los cinco millones de pesos.
La publicación se viralizó y aunque aún no surtió el efecto deseado, Feliz confía en que con la difusión de la noticia y la solidaridad de la comunidad, pueda recuperar sus elementos de trabajo.
En sus habituales partes de prensa, la Jefatura Departamental -por estas horas en pleno traspaso de mando y con nuevas autoridades-, no incluyó ninguna información al respecto. Según pudo saber LA CAPITAL, la Justicia investiga el caso y hasta ahora no hay sospechosos identificados ni fue hallado ningún otro elemento de relevancia.