Los estudios realizados en las últimas horas en la pierna izquierda de Pablo Lugüercio arrojaron resultados adversos a las pretensiones de todo el “mundo Aldosivi”. Es que tras los mismos, el doctor Carlos Blas Vóttola confirmó que el jugador sufrió un desgarrro en el isquiotibial de su pierna izquierda que no es quirúrgico pero si agrava la brusitis que acababa de marginar a Lugüercio de los partidos ante Estudiantes y Defensa y Justicia.
Pablo volvió recuperado de esa lesión en ocasión del partido que Aldosivi igualó el domingo como local ante Temperley (1-1) pero tuvo que dejar la cancha a los 40′ del segundo tiempo cuando sintió un dolor que le hizo frenar su carrera con pelota dominada sobre la banda derecha.
Ahora, el ex jugador de Estudiantes y Racing encarará un proceso de recuperación que lo dejará afuera de la mayor parte del campeonato, teniendo en cuenta que este torneo de Transición es corto y Aldosivi le restan jugar 11 partidos.
Por eso se estima que, si la recuperación va por carriles normales, Lugüercio reaparecería para jugar los últimos tres o cuatro partidos del torneo.
Mientras tanto la dirigencia y el cuerpo técnico analizaron la opción de pedir a AFA que habilite la posibilidad de conseguir un reemplazo temporal. Sin embargo, el hecho de que la lesión de Lugüercio no requiera una intervención quirúrgica y que no quede afuera de todo el torneo significa un escollo para las pretensiones aldosivistas.
En consecuencia, Quiroz tendrá que optar entre Ismael Quilez, Neri Bandiera y Matías Rosso para intentar disimular la ausencia de un jugador clave para el andamiaje de este Aldosivi.
La primera prueba será en Tucumán, donde Aldosivi visitará el domingo desde las 20 a Atlético en cotejo correspondiente a la séptima fecha. Ayer se confirmó que el tandilense Andrés Merlos será el árbitro encargado de impartir justicia en dicho encuentro.