Peñarol cumplió con el primer requisito para mantener sus ilusiones de llegar a los play-off de la Liga Nacional de Básquet. Su parte está hecha con el triunfo conseguido anoche sobre Independiente de Oliva por 86-77 en Once Unidos.

Ahora sus seguidores aguardarán que los demás hagan su parte, ya que la posibilidad de llegar a la postemporada se jugará en los dos últimos partidos de Ferro y en el que le queda a Regatas Corrientes. Y en los próximos días serán fanáticos de Zárate Básket (ya eliminado con la victoria peñarolense), San Lorenzo, los  rivales de los de Caballito, y Obras, adversario litoraleño. Cualquier derrota de “verdolagas” o correntinos pondrá a los “milrayitas” en la próxima instancia del torneo.

Después del escándalo Thornton-Laginestra del último domingo, todo transcurrió como si nada hubiese ocurrido. El estadounidense fue inicial y el equipo jugó en un nivel similar al de sus últimas presentaciones en Once Unidos.

Atacó aceptablemente y tuvo consistencia defensiva sólo por momentos. En los pasajes en los que la encontró, sacó diferencias. Sobre todo cuando pudo correr el contraataque.

Así fue, después de un primer cuarto parejo, en el arranque del segundo parcial. Ahí congestionó la pintura, sacó tres contraataques fulminantes y estableció un parcial 11-0 en dos minutos que representó el primer quiebre de la noche.

El 35-22 que alcanzó entonces, sin embargo, se le escurrió como arena entre los dedos por una acusada baja de tensión defensiva. De poco le sirvió a Peñarol repartir bien los tiros. Independiente, liberado de presiones, con un gran aporte de Ezequiel Paz, llegó en partido al entretiempo (43-47) y se colocó a dos puntos en el comienzo del último.

El peligro hizo reaccionar a los “milrayitas”, que recuperaron la contracción defensiva. Salvo a Paz, controló el tiro exterior visitante. Volvió a recuperar la pelota en primera línea y otra vez volvió a correr vía Fernández para tomar distancias. Y en el último cuarto las consolidó, de movida, con el mejor pasaje de Thornton, bien marcado por el marplatense Giletto en los primeros tres parciales.

Peñarol, en definitiva, venció por primera vez en su historia a Independiente de Oliva (venía precedido de nueve derrotas consecutivas) y desató un carnaval entre sus parciales.

Ahora, sin embargo, vendrán días de deshojar la margarita. Y de ver si la posibilidad de jugar play-off lo quiere “mucho”, “poquito” o “nada”.

J. Valinotti 13, V. Fernández 20, T. Monacchi 15, A. Thornton 17 y D. Simpson 12 (FI); F. Tolosa 3, J. Morales 4, O. Sarmiento 0 y G. Torres 2. DT: Hernán Laginestra.

N. Marcucci 2, J. Noblega 7, J. Banegas 11, S. Giletto 10 (x) y T. Nally 11 (FI); E. Paz 19, F. Barroso 0, Augusto Alonso 9, P. Alderete 6, S. Ballarena 2 y J. L. García Guerrero 0. DT: Martín González.

Estadio: Once Unidos.

Árbitros: Fernando Sampietro, Gonzalo Delsart y Franco Anselmo.

Parciales: 24-22, 47-43 y 66-57.