Durante más de tres horas declaró el exjefe de policía y rechazó las acusaciones
José Luis Segovia, el exjefe departamental que permanece detenido, fue el único de los imputados que pidió declarar. Lo hizo ante el fiscal Marcos Pagella y defendió su inocencia. Dijo que por atacar la actividad de "arbolitos", venta de drogas y el depósito de secuestros le pasaron factura.
José Luis Segovia.
El exjefe de la policía Bonaerense en Mar del Plata, comisario mayor José Luis Segovia, declaró por más de tres horas ante el fiscal Marcos Pagella y dijo ser inocente de todos los cargos, además de dar a entender que la acusación múltiple que se le hace está basada en los “enemigos” que se ganó durante su función.
Segovia fue asistido en la audiencia del artículo 308 por su defensor Martín Bernat, quien al concluir la misma expresó a LA CAPITAL que “esto por ahora es un escándalo policial, pero apuesto mis fichas a que se va a convertir en un escándalo judicial porque es un disparate la hipótesis de la acusación”. Al respecto señaló que “aunque no tuvimos acceso a la prueba, todo lo que se mencionó son referencias de terceros, sin pruebas directa sobre Segovia… tanto a él como a mí nos enoja mucho todo esto que se armó y que no tiene ningún sentido”.
Trasladado desde la Estación Comunal de la Policía de Balcarce, donde pasó la noche, Segovia llegó a Tribunales en horas tempranas de este jueves, pero recién fue llevado a declarar cerca del mediodía. Luego de la extensa lectura de la imputación, comenzó una comparecencia cuyo contenido forma parte del secreto sumarial que se ha decretado sobre todas las actuaciones.
La hipótesis acusatoria que sostiene el Ministerio Público sobre la detención de Segovia
A Segovia se le imputa ser jefe de una asociación ilícita, exacciones ilegales agravadas y encubrimiento agravado, estafa procesal, abuso de autoridad y violación a los deberes de su cargo, falsificación ideológica de instrumento público, incumplimiento a los deberes de funcionario público, intermediación financiera no autorizada, expendió y puesta en circulación de moneda apócrifa, compra venta de divisas de origen ilícito y explotación, administración u operación de juegos de azar sin autorización de la autoridad competente.
Todo esto quedó resumido en el pedido de indagatoria hacia todos los imputados, en donde la Justicia sostuvo que “un grupo indeterminado de personas, integrado por funcionarios de la Policía de la Provincia de Buenos Aires en actividad y otros retirados, agentes de la Policía Federal argentina, sujetos con antecedentes penales y demás individuos, se asociaron criminalmente para llevar adelante distintos hechos ilícitos, todo ello con la finalidad de obtener indebido provecho económico”.
“Esta organización criminal se conformó por distintos grupos de personas que actuaron en la modalidad de células -sin que necesariamente todos ellos tuvieran relación o conocimiento entre sí e incluso alguno de ellos no individualizados a la fecha-, con distintos grados de participación y responsabilidad criminal, pero respondiendo todos a un mando claro ejercido por el entonces Jefe de la Dirección Departamental de Investigaciones -actual Titular de la Jefatura Departamental-, Crio. Mayor José Luis Segovia quien, en definitiva, tomaba las decisiones y asignaba los roles”, indica la acusación.
“Conformaban esta organización delictiva -se agrega-, estable y perdurable a lo largo del tiempo, el policía de la provincia de Buenos Aires Gastón Moraña, el ex oficial de la misma fuerza Javier Martín González, el integrante de la Policía Federal Argentina Nicolás Rivademar, el agente retirado de la policía provincial Christian Adalberto Holtkamp, el abogado Lautaro Resúa y el ciudadano Jorge Javier Toletti, todos éstos brazos ejecutores directos de las maniobras delictivas dirigidas por Segovia”.
“También componían la misma asociación criminal otro grupo de personas que, con menor grado de importancia en el escalafón de la banda, realizaban tareas secundarias y participaron, aunque muy escasamente, de sus beneficios económicos, entre los que se encuentra el policía Javier Rubén Collova”, finaliza.
Al defenderse, Segovia atribuyó las acusaciones a haber sido un jefe departamental que mandó a iniciar causa en la Justicia Federal contra la actividad de “arbolitos” de Independencia y Luro, que atacó la venta de drogas y sacó a las comisarías se las investigaciones y por consiguiente de los negociados, y que también atacó las irregularidades en el predio de secuestro de automotores de la policía.
Por otra parte, los otros tres detenidos, los policías Gastón Moraña y Nicolás Rivademar, y el expolicía Javier González, se negaron a declarar por consejo de sus abogados, Osvaldo Verdi y Cristian Moix, éste por los dos últimos. “Ya dejé constancia que Moraña quiere declarar y que va a hacerlo una vez tengamos acceso al expediente”, dijo Verdi a LA CAPITAL.