Por Sebastián Arana
Después de seis partidos sin triunfos ni goles, el “qué” importaba más que el “cómo”. A Alvarado le urgía ganar. Como lo conseguía, esta vez, era una cuestión secundaria.

Con mucha más actitud que juego, y con oportunismo para explotar un error rival, lo logró. Belinetz, después de robarle un balón a Cravero en la salida, marcó el único gol y sacó a los suyos de terapia intensiva. Al cabo, Alvarado le ganó 1 a 0 a San Miguel en cotejo correspondiente a la decimotercera fecha de la Zona A de la Primera Nacional.

El equipo visitante fue un poco más en un primer tiempo definitivamente extraño. San Miguel dominó terreno y pelota en varios pasajes. Marcó condiciones con el permanente pasaje al ataque de Antunes y sobre todo Grance, los dos laterales. Y con la movilidad y habilidad de Nahuel Rojas, difícil de controlar para los volantes de Alvarado.

Varias fueron las aproximaciones de los de Coleoni, que además ganaron mucho de arriba en el área rival. Y los desbordes y centros que no encontraron destino por centímetros.

Sin embargo, Lungarzo sólo tuvo tres atajadas: un remate de Batallini y un cabezazo de Ferrero que le fueron al cuerpo y un centro peligroso de Luján que se cerró y que tuvo que desviar con un manotazo.

Alvarado, teniendo menos la pelota y con recursos menos atractivos, fue más peligroso. La defensa de San Miguel se complicó horrores con los pelotazos largos. A los 6’, después de un rechazo, Guillermo Sánchez le ganó con el cuerpo a una floja cobertura de Rentería, eludió a Pucheta y, con la línea de gol cubierta por tres rivales, pateó por encima del travesaño. Tres minutos más tarde, tras otro pelotazo, Belinetz llegó hasta el fondo y metió el centro atrás y el propio Sánchez, en la línea del área chica y sin arquero, no pudo conectar bien y la tiró afuera. Dos chances gigantes y con muy poco.

En el resto del primer tiempo el equipo marplatense sufrió por sus dificultades para defender los costados y su poca fluidez para manejar la pelota. A punto tal de hacerle perder la paciencia a sus fieles.

Sin embargo, cuando el primer tiempo se moría, Cravero se enredó para salir desde el fondo, Belinetz le robó el balón, enfiló a Pucheta y lo superó con un potente derechazo cruzado para terminar con la malaria y establecer el 1-0.

El gol le trajo a Alvarado unos minutos de paz tras la reanudación. Se agrupó mejor y las ropas de contraaatacador le sentaron mucho mejor. A los 8’ Mansilla le metió un buen pase a Belinetz, pero esta vez Pucheta tapó la exigida definición del “9” en el mano a mano.

San Miguel acusó el golpe. Y recién pudo reasumir el protagonismo pasado el cuarto de hora, ayudado también por el inconsciente retroceso local.

Rojas apareció más para liderar a los suyos. Paulatinamente, se volvió a acumular trabajo en el escritorio de Lungarzo. El arquero desvió un cabezazo a quemarropa de Antunes y tapó un remate con poco ángulo a Rojas en el primer palo.

Sin embargo, la solidez de sus compañeros de defensa le alivianaron un poco la tarea en el cuarto de hora final. Y entre todos aseguraron un triunfo indispensable.

Síntesis

Alvarado 1
Lungarzo (7); Mariano Bettini (5), Alan Robledo (6), Nicolás Ortiz (6) y Lucas Monzón (5); Nery Leyes (5) y Matías Mansilla (5); Guillermo Sánchez (5), Sebastián Jaurena (5) y Tomás Rambert (5); Belinetz (7). DT: Ariel Guevara.

San Miguel 0
J. Pucheta (6); Kippes (5), Dixon Rentería (5) y Facundo Cardozo (5); Ivan Antunes (6), Matías Rojas (6), Tiago Cravero (4) y Grance (6); Nahuel Rojas (7); Jorge Ferrero (6) y Martín Batallini (5). DT: Gustavo Coleoni.

Gol: primer tiempo, 44′ Belinetz.
Cambios: segundo tiempo, 13′ Diego Sosa (6) por Batallini y Catriel Sánchez (5) por Kippes, 31′ Lamardo por Rambert, 33′ David Muller por Cravero, 37′ Vadalá por Mansilla, 43′ Melillo por Antunes y 46′ Malagueño por Guillermo Sánchez.
Cancha: Estadio “José María Minella” (buena).
Árbitro: Nelson Sosa (5).