Lanús le puso fin al invicto del mítico “José Martínez”
Derrotó a Quilmes, por 77 a 74. El líder de la Conferencia Sur de la Liga Argentina de básquetbol se quedó con un partido cambiante, en un final cerrado.
Por Marcelo Solari
Por clima e intensidad, se pareció mucho a un partido de play-off. Había motivos. Ambos transitaban por extensas rachas positivas y, al final de cuentas, una de las dos series iba a claudicar. En definitiva, el puntero Lanús derrotó a Quilmes, 77 a 74, en un juego con numerosas aristas de interés, y puso fin al invicto del Microestadio Centenario “José Martínez”.
El primer tiempo tuvo dos mitades bien diferenciadas. La primera, claramente favorable a Quilmes, y la segunda, totalmente al revés.
El equipo local hizo delirar a su gente con diez minutos iniciales muy prometedores. Entre el buen juego de pases y la alta efectividad, Quilmes fue amplio dominador del juego y estableció diferencias notorias en el resultado (24-11). La acertada distribución, el tiro abierto de Lisandro Fernández (venía derecho con el aro y no le gustó nada salir) y las profundizaciones para Rodrigo Acuña dieron tantos réditos como la contracción defensiva y un Lanús desordenado y sin rumbo, ya que el ingreso del provocador Devonte Patterson sólo fue productivo cuando el extranjero se dedicó a jugar, en lugar de propiciar el duelo dialéctico y los roces.
Se desvaneció demasiado rápido la buena renta acumulada por el local. En menos de 5 minutos del segundo cuarto, Lanús se acercó a 26-22. Su mejoría defensiva fue ostensible, protegiendo mejor su zona interior para evitar rompimientos y penetraciones, y también encontró buenos tiros perimetrales. La conducción de Mariano Gago ordenó al “Granate” y Quilmes sintió el rato de descanso de algunos de sus iniciales.
Por momentos, el aro de Lanús parecía clausurado. Al local le costaba llegar al gol y, cuando quiso acordar, Lanús ya estaba al frente (29-32), con una cuota muy importante de gol exterior.
La humedad en el piso obligó a interrupciones luego de un par de caídas aparatosas, con riesgo físico para los protagonistas incluido.
Quilmes estuvo maniatado durante más de 8 minutos. Pero logró soltarse en los 90 segundos finales, tuvo un buen cierre y hasta se fue al vestuario al frente en las cifras con un triple a la carrera de Junior Cequeira.
Friccionado y enredado resultó el desarrollo del tercer segmento. Ambos equipos se vieron complicados con la acumulación de faltas personales. Lanús obtuvo buenos réditos de la decidida carga al rebote ofensivo, si bien prácticamente no se sacaron diferencias y entraron en un equilibrio marcado al desenlace.
Lanús, que abusó del tiro de tres puntos, se asomó con un brillante Andrés Lugli (manejó el juego y el diálogo con la dupla arbitral) y apariciones puntuales de Joaquín Ríos, en tanto Quilmes respondió con dos triples muy festejados de Rodrigo Acuña, pese a lo cual el “tricolor” lucía apurado en exceso.
El que mejor entendió cómo había que jugar fue Acuña. Y tras la salida por cinco faltas de Patterson (se lo buscó toda la noche), el pivote quilmeño adelantó a los suyos con acciones muy positivas cerca del canasto rival. Claro que la fragilidad para protegerse del rebote ofensivo le dio nuevas oportunidades a Lanús y el tramo final estuvo cargado de suspenso. Hasta que un triple de frente al canasto de Capponi le abrió la puerta al noveno triunfo consecutivo del “granate”.
La síntesis
Quilmes 74
L. Cequeira 11, L. Fernández 17, E. Giménez 3, A. Ecker 4 (x) y R. Acuña 28 (FI). T. Verbauwede 9, J.Ruiz 2, G. Sala 0. DT: Luis Fernández.
Lanús 77
A. Lugli 18, L. Capponi 14, J. Ríos 17, J. Scacchi 4 y F. Alorda 9 (x) (FI). D. Patterson 6 (x), L. Di Muccio 3, M. Gago 3, M. Franchino 3 (x), F. Castiarena 0. DT: Sebastián Saborido.
Estadio: Microestadio Centenario “José Martínez”, de Quilmes.
Árbitros: José Domínguez y Emanuel Sánchez.
Parciales: 24-11, 40-36 y 54-54.