El presidente del Ente Municipal de Vialidad y Alumbrado, Pablo Simoni, reconoció que el 10% del alumbrado público del Partido de General Pueyrredon se encuentran apagado.
El propio funcionario admitió que esa cifra excede por lejos el porcentaje que existía en Mar del Plata y Batán, que en los últimos años era de entre 4% y el 5%, tal como generalmente ocurre en otras localidades del país.
“En General Pueyrredon hay 76 mil luminarias y actualmente unas 7.600 están apagadas”, dijo Simoni en diálogo con María Delia Sebastiani en LU6, aclarando que pese a la magnitud del número, el Emvial está logrando mejorar la situación “muy paulatinamente”.
El titular del organismo explicó que el problema adquirió su mayor magnitud durante los primeros meses de 2016 hasta que desde mediados de año, comenzaron a registrarse algunos progresos.
Simoni comentó que a principios de 2016, el gobierno del intendente Carlos Arroyo “arrancó con falta de insumos y de recursos” y puso como ejemplo el hecho de que el “el 45% de los equipos” del Emvial se encontraban rotos.
El funcionario dijo que durante los 8 meses y medio de su gestión, hubo ciertos avances, entre los cuales destacó haber podido reparar algunos hidroelevadores que se encontraban fuera de funcionamiento.
De todos modos reconoció que existe una gran cantidad de reclamos pendientes, algunos de los cuales tienen plazos mayores a los 15 o 20 días. La cifra también es mayor a la que en promedio se registraba hasta 2015.
El número de 7.600 luminarias apagadas “refleja exactamente lo que pasa” comentó Simoni, precisando que el problema de falta de luz en la vía pública se distribuye en todo el Partido por igual. “Estamos hablando de las luces de las calles, las avenidas y de las plazas de Mar del Plata, Batán y Sierra de los Padres”, comentó.
Al describir cuáles son los recursos que actualmente el municipio dedica a este tema, precisó que el Emvial trabaja con “3 cuadrillas durante la mañana, otras 2 durante la tarde y 1 en el horario nocturno”.
Según explicó, esta última desarrolla sus tareas en compañía de una guardia policial, para proteger al personal ante eventuales hechos de inseguridad.