Calor, nubes y despertar tardío durante el primer día de 2017
Con la escasa circulación de algunos taxis, y casi nula de colectivos, la calles se mostraron desiertas, pobladas únicamente por algunos caminantes o barrenderos que comenzaron su tarea diaria.
La ciudad amaneció lentamente ayer, con los resabios de una noche de festejo, como los vestigios de las cañitas voladoras y hasta las ramas caídas durante el temporal del 31 a la tarde.
Poco más de 16º se registraron a las 8, temperatura que invitó a los más madrugadores a la tradicional caminata por la costa y algunos fanáticos del deporte no dejaron pasar la oportunidad de la sesión diaria de trote, algunos de los cuales se cruzaron con los adolescentes que terminaban sus festejos nocturnos en la zona de Playa Grande.
Con la escasa circulación de algunos taxis, y casi nula de colectivos, la calles se mostraron desiertas, pobladas únicamente por algunos caminantes o barrenderos que comenzaron su tarea diaria, por ejemplo, en la zona de la Peatonal.
En tanto, después de la tormenta del sábado, gran parte de la jornada dominguera se presentó calurosa y con amenaza de chaparrones, con una temperatura máxima que rondó los 30º, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
A pesar de las presencia de nubes, por momentos de cielo cubierto por completo, la humedad reinante invitó a disfrutar del aire libre.
Las buenas condiciones climáticas, con altas temperaturas, permanecerán al menos durante la primera parte de la semana aunque el pronóstico no descarta algún episodio de lluvia.