Luis Alberto Lacalle, expresidente de Uruguay entre 1990 y 1995 y padre del actual mandatario, Luis Lacalle Pou, visitó este martes el NH Gran Hotel Provincial, una obra arquitectónica única en el país. Y se reencontró, a su vez, con esta ciudad, que no recorría desde hacía tiempo, según relató a LA CAPITAL. “La Feliz nos ha hecho feliz”, indicó al finalizar el recorrido.

Rodeado de amigos argentinos y familiares, Lacalle evitó opinar sobre cuestiones coyunturales de Argentina, en momentos en que este país vive una transición presidencial tras un largo proceso electoral.

En ese sentido, expresó: “Yo tengo una norma, que es nunca opinar de política interna de Brasil ni de Argentina, porque no nos gusta que ustedes (por las personas que viven en Argentina) opinen de la nuestra, entonces simplemente decimos Argentina se ha expresado” en las urnas, a partir del balotaje del domingo 19 de noviembre, en el que resultó victorioso el líder de La Libertad Avanza, Javier Milei.

“Hay un presidente bastante nuevo, bastante distinto. Ojalá sea exitoso: una Argentina próspera, justa, ordenada y rica es el mejor negocio para Uruguay, así que ojalá le vaya espléndido”, dijo en alusión a la nueva administración de Milei, que comenzará el próximo 10 de diciembre, tras la asunción.

Además, deseó que tanto Uruguay como Argentina estrechen los lazos y fortifiquen el vínculo bilateral, para beneficio de ambos países. “Espero que las relaciones entre el presidente actual, que es mi hijo y al que le queda un año (de gestión), que en ese tiempo se puedan entender” con Milei, expresó.

Y sobre el gobierno de Lacalle Pou, quien asumió en el mes de marzo de 2020 como referente del Partido Nacional, también fue cauto: “Siempre digo lo mismo, que estoy orgulloso y preocupado, preocupado porque no es fácil gobernar”, indicó Lacalle, quien también se desempeñó como senador por la Banda Oriental del Uruguay y fue uno de los políticos que bregó y defendió la llegada de la democracia en su país.

En ese sentido, al igual que Argentina, Uruguay también acaba de celebrar sus cuarenta años de democracia, un hecho que Lacalle destacó positivamente.

Cabe señalar que Lacalle llegó a Mar del Plata desde Maldonado, Punta del Este, invitado por amigos. “Estamos como huéspedes en Malargüe, que es una casa de unos amigos, una bellísima propiedad rural que yo conocía de nombre y nos invitaron a pasar unos días”, comentó. “Vinimos desde Maldonado en un vuelo fantástico, de cuarenta minutos, y de paso quisimos conocer un poco más Mar del Plata, es la segunda vez que estoy en Mar del Plata y realmente me impresiona todo lo que ha cambiado. La última vez que estuve fue hace veinte años”.

Tentado a conocer el interior del NH Gran Hotel Provincial, el ex mandatario recorrió cada espacio histórico de esta construcción: “Nunca había visto algo tan desmesurado, don Florencio Aldrey ha sido tan amable en invitarme a conocer todos sus dominios”, expresó.

Lacalle deseó que tanto Uruguay como Argentina estrechen los lazos y fortifiquen el vínculo bilateral, para beneficio de ambos países.

Asimismo, deseó “volver algún día” y contó que también quedó impresionado por la gastronomía marplatense. “Fuimos a un restaurante fantástico, salvo el tiempo que no ha acompañado mucho, la feliz nos ha hecho feliz”, reconoció y dijo ya haber empezado sus vacaciones.

“En Montevideo, el año en serio termina dentro de 20 días, adelantamos las vacaciones un poco aquí”, sintetizó el político de 82 años.

Además de esta visita internacional, la cercanía entre Mar del Plata y Montevideo se afianzará el próximo verano, cuando Aerolíneas Argentinas habilite vuelos directos hacia la capital del vecino país. Habrá dos frecuencias semanales hasta el 3 de marzo, según se informó desde la empresa argentina.