Por Marcelo Solari

SANTIAGO (Enviado especial).- La marplatense Aldana Bertran fue protagonista del histórico debut del skateboarding en el programa panamericano. La Explanada de Deportes Urbanos ubicada en el predio del Estadio Nacional lució casi colmada con la presentación de la competencia de street femenina -por la mañana- y street masculina  por la tarde-.

Bertran, quien en noviembre cumplirá 25 años, ocupó el séptimo puesto, con 102,49 puntos. Pudo haber terminado un par de puestos más arriba, pero tomó riesgos para obtener un puntaje mejor y no logró ascender en el clasificador final.

La prueba fue dominada por Brasil de manera arrasadora. El oro fue para, a esta altura, una de las grandes figuras de los Juegos: Rayssa Leal, de apenas 15 años. No falló ningún truco, le sobró fluidez y frescura, y también valentía, porque nunca especuló. Totalizó 236,98 puntos. Un oro recontra merecido.

Su escolta fue la también brasileña Pamela Leite Rosa (plata,), con 211,34; y el bronce se lo llevó la estadounidense Paige Heyn, otra gran promesa adolescente de 15 años, con 176,35.
La deportista marplatense continuará compitiendo en los torneos de clasificación que otorgan puntaje para el ranking olímpico que permitirá acceder a los Juegos de París 2024.

“En primer lugar, estoy muy contenta por el debut de nuestro deporte en los Juegos Panamericanos. Es una experiencia muy loca estar acá y ser parte de esto”, expresó en la zona mixta a la prensa marplatense la deportista que empezó a patinar en el patio de su casa, a los 14 años, y allí lo hizo durante un tiempo, hasta que se inauguró el Skate Park.

-¿Cuáles son tus sensaciones después de la competencia?
-Es complicado lidiar con los nervios. El skate es un deporte muy técnico y el dominio de esas sensaciones es algo imprescindible. El margen de error es mínimo para acertar o fallar un truco, y eso puede derivar en un buen día o un mal día. No todos los campeonatos salen bien, pero es parte de la cuestión.

-Acaso con una estrategia más conservadora podrías haber estado un par de puestos más arriba. Pero tomaste más riesgos con una muy buena actitud. ¿Fue así?
-Al principio estaba muy nerviosa y fallé por eso. Siempre me pasa. Cuando escucho mi nombre por primera vez es como que me tiembla todo. Después me relajo. Fallé bastante y sí, a raíz de esos fallos, traté de arriesgar un poco más para ver si podía sumar más puntos. No se dio, pero lo intentamos.

-¿El contexto, el entorno, los escenarios son como lo esperabas o superó tus expectativas?
-Nunca había estado en los Juegos Panamericanos, ni siquiera como espectadora, así que, más allá de lo particular del skate, no me imaginaba que era algo así. Me parece una experiencia increíble. En lo específico de mi deporte, los torneos en los que competimos son bastante similares. Acá había mucha gente mirando, la pista me pareció muy bien hecha, la gente trabajó de manera muy correcta. Todo súper bien.

-¿Notás un cambio en la percepción de la gente sobre el skateboarding desde que se convirtió en olímpico y ahora también en panamericano?
-Totalmente. La percepción de la gente cambió muchísimo para bien. Creo que no se valoraba de la misma manera que ahora. Surgió más apoyo. Es un deporte que requiere mucha dedicación, mucho entrenamiento. Y creo que se vio ese lado que por ahí antes no se veía.