La Justicia de Garantías rechazó los planteos de la Fiscalía N° 12, y del intendente Guillermo Montenegro, para desalojar a unas personas acusadas de tomar un terreno en el Bosque Peralta Ramos, pero ordenó que no pudieran ingresar al predio o alterarlo mientras avanza la investigación.

En su resolución, el titular del Juzgado de Garantías N° 2, Saúl Errandonea, no hizo lugar a la constitución de particular damnificado solicitada por el intendente Guillermo Montenegro, al entender que no poseía derecho alguno sobre el inmueble.

Además, Errandonea también rechazó la petición del fiscal Juan Pablo Lódola de desalojar a las personas que ocupaban el predio ubicado en Las Margaritas y Los Matacos, pero sí ordenó una medida cautelar innovativa para que nadie ingrese o altere ese terreno.

El juez de garantías explicó que, en este caso, “no se encuentran en juego derechos sociales vulnerados, como así
tampoco se ha denunciado que en el lote en cuestión se hayan realizado actividades que impulsen el poder de policía y control del referido estamento gubernamental y que justifiquen su intervención”.

Por lo que, “más allá de la común preocupación expuesta por el intendente municipal y el aporte realizado, no corresponde otorgar el rol de parte procesal al peticionante”, remarcó.

En cuanto al pedido de vecinos del Bosque Peralta Ramos de ser particulares damnificados en este supuesto intento de tema, el juez explicó que “ninguna persona detenta la propiedad a título de propietario, y  el simple hecho de haber colocado un perímetro plástico y carteles de ‘propiedad privada’, no otorga derechos posesorios ni derechos de tenedores”. Es decir, que los denunciantes no tenían derecho alguno sobre el inmueble.

Terreno tomado

El terreno que motivó la denuncia de Montenegro está ubicado en el Bosque Peralta Ramos, en  Las Margaritas y Los Matacos y pertenecería a una empresa que estaría en quiebra, con domicilio fiscal en Capital Federal.

En junio, vecinos del Bosque Peralta Ramos atentos que veían a gente “merodear” en ese terreno que estaba vacío, decidieron alambrarlo y ponerle carteles con las leyendas de “propiedad privada” y “no pasar”. Sin embargo, en los primeros días de agosto, al menos cuatro personas ingresaron al inmueble de Las Margaritas y Los Matacos y quitaron por la fuerza el alambrado perimetral.

Además, los vecinos denunciaron la existencia de una Fiat Fiorino utilizada por los acusados, desde donde hacen “guardias” para custodiar el terreno y la zona.

El fiscal Lódola consideró que los acusados ingresaron al predio de manera ilícita, tras violentar el alambrado puesto por los vecinos y que, desde agosto hasta el 10 de octubre, han trasladado camiones con materiales para la construcción, solicitaron la colocación del medidor de electricidad y mantuvieron una actitud violenta y amenazante frente a los vecinos denunciantes.