“BelenCita” es el espacio para conocer personas, surgido desde la necesidad de conectar con desconocidos, sin tener de intermediarias a las redes sociales, que ya funciona en Mar del Plata.

Cuando el miedo por relacionarse seguía latente como consecuencia de la pandemia y en las charlas con su gente cercana siempre estaba la misma conversación: “conocer gente nueva es muy difícil”, María Belén Bona, comenzó a gestar la idea.

En esas charlas coincidían en las razones de las dificultades de conocer gente: “las personas no nos relacionamos como antes y entrar en un nuevo grupo es casi imposible. En una era donde las redes sociales predominan nuestro tiempo, conocer gente es más fácil y cotidiano por allí, a lo que se le suman los resquemores que dejo la pandemia”, enumeró.

De este conflicto y esa necesidad de forjar “vínculos reales”, surgió “hacer algo tipo solos y solas y la gente se empezó a copar mucho”. Ese fue el nacimiento de “BelenCita” espacio en el que comenzó a guiar encuentros de personas heterosexuales y mayores de 25 años, que acuden de manera solitaria y con la necesidad y voluntad de vincularse personalmente con otros.

Según Belén ese espacio, que fue creciendo cada vez más, no se generó en la búsqueda de lo sexual o el romance, sino de “conectar con el otro atravesando debates, juegos y viendo cómo se relaciona ese otro con el resto”.

Con el tiempo, “BelenCita” tomó un rumbo distinto al que Belén había establecido al principio. No solo se trata de vincularse y encontrar personas que quieran divertirse y realizar planes de amigos, generando un espacio de pertenencia para “hacer cosas”.

Desde el comienzo del proyecto, Belén siempre estableció reglas, no solo para que sea más fácil administrar los distintos grupos, sino también por “la responsabilidad” que siente al ser intermediaria “entre desconocidos que se se conectan con otros desconocidos” en su espacio.

Es por ello que marca y remarca que, para continuar, cada participante debe seguir las reglas a rajatabla.

En su “Club de encuentros de verdad” Belén remarca la amistad, la familia y el amor que encuentran quienes acuden a las reuniones. “Ir a ‘BelenCita’ significa abrirte a todo tipo de relaciones, que surgen en un espacio de vinculación cuidado y que traslada a un pasado, sin tantas redes sociales”. Y cuando se le pregunta ¿Es como un Tinder presencial? Responde contundente: ” Tinder ‘no le llega ni a los talones”.