Con organización de El Séptimo Fuego, los días 19, 20 y 21 de agosto se llevará a cabo en Mar del Plata un taller intensivo de “introducción a the meisner technique”, a cargo de la docente acreditada por el Tue Acting Institute de Estados Unidos, Irina Casali, con la colaboración de Alessandro Zatta.

Dirigido a profesionales y estudiantes actores (de teatro y cine), directores y bailarines, el taller teórico/practico está orientado a quienes no tienen experiencia y a quienes tienen experiencia en la tecnica para impulsar el trabajo ayudando a cada uno a superar su limite y a explorar zonas desconocidas.

El taller se dictará en la sede de El Séptimo Fuego de Bolívar 3675 y las personas interesadas en inscribirse pueden consultar a través del correo electrónico [email protected]

The Meisner Technique es uno de los enfoques de actuación más poderosos, sistemáticos, completos del teatro occidental, con el que se han formado actores y directores ilustres. Apreciado y utilizado en los Estados Unidos, es aún poco practicado en nuestro país.

La Técnica Meisner desarrolla todos los elementos necesarios para construir una situación dramática a partir de la capacidad de acción y reacción, momento a momento, para “vivir verdaderamente las circunstancias imaginarias” de la obra.

The Meisner Technique desarrolla la concentración y la imaginación, entrena el instinto y el impulso orgánico, fomentando la realidad de la acción y la autenticidad de los sentimientos, involucrando al actor por completo en lo que hace.

La excelencia de la interpretación depende de la respuesta impulsiva e inconsciente del actor a lo que sucede. Todo el trabajo de Sanford Meisner consiste en “Llevar al actor de la cabeza al corazón”.

Sanford Meisner se ocupa de desarticular los dos elementos principales que arruinan la actuación de un actor: el primero es que está demasiado centrado en sí mismo y el segundo, consecuencia del primero, es que no escucha.

Meisner crea un método específico para eliminar estos obstáculos. El ejercicio básico es el Ejercicio de Repetición: Si no puedes escuchar -dice Meisner- no puedes actuar, no importa cuán talentoso seas. Este ejercicio fuerza a un contacto auténtico. Cuando estamos en contacto con una persona la emoción se produce de forma espontánea, sin esfuerzo. Es equivalente a la “barra” para un bailarín: entrena la capacidad de ser totalmente abierto, vulnerable, en un contacto auténtico y permite responder a lo que sucede “aquí y ahora”, momento a momento. El trabajo libera al actor de las defensas y hábitos que le impiden actuar en base a su propia naturaleza, para desarrollar la empatía, valorando la singularidad de cada persona.

Cada acción es una reacción, que depende de la capacidad de escuchar y responder en una forma auténtica, sin filtros, en relación a lo que sucede. Crucial para un actor son los reflejos: la capacidad de reaccionar antes de que ocurra el pensamiento.

Siguiendo el impulso orgánico la persona puede liberarse de las máscaras de los personajes cotidianos para expresar el verdadero Ser. Si las palabras mienten siempre, la conducta no miente nunca, pues: “Un gramo de comportamiento vale más que un kilo de palabras” -define Meisner.

Por ello en el taller se busca trabajar un entrenamiento psíquico-físico específico para activar estos elementos.

“El trabajo del actor es un trabajo emocional. Pero las emociones no se pueden controlar, están ligadas a la importancia que alguien o algo tiene para nosotros. Al darse cuenta de algo que tiene un significado profundo, las emociones suceden sin forzar. Estudiaremos cómo conectar con la dimensión emocional que es el conocimiento específico del actor” indicó Casali.