Rusia lanzará su primera misión a la Luna desde 1976
El despegue del módulo Luna-25 tendrá lugar el 11 de agosto. Está previsto que el vuelo tarde entre "cuatro días y medio y cinco días y medio" en llegar al satélite del planeta Tierra.
MOSCU.- Rusia retoma su programa lunar, abandonado durante décadas, con el lanzamiento el próximo viernes 11 de agosto de la nave espacial Luna-25, según informó la agencia espacial rusa Roscosmos.
“El lanzamiento del cohete portador Soyuz-2.1b con un bloque propulsor Fregat y la estación automática Luna-25 está previsto para el 11 de agosto, a las 2.10 hora de Moscú (20.10 hora argentina del 10 de agosto)”, señaló Roscosmos en un comunicado.
Según la agencia, los especialistas de Roscosmos concluyeron este lunes las labores de montaje del cohete portador y la nave espacial en el cosmódromo ruso de Vostochni.
“La Comisión Estatal autorizó trasladar y emplazar el cohete en el complejo de lanzamiento el próximo 8 de agosto”, añadió Roscosmos.
La agencia espacial rusa señaló que la estación fue fabricada en su totalidad con componentes rusos, con la aplicación de “los más recientes logros en la rama de la fabricación de equipamiento espacial”.
“Luna-25 se diferencia radicalmente de sus antecesores respecto a su alunizaje: las estaciones lunares rusas alunizaban en la zona ecuatorial, la nueva estación alunizará en una zona polar con un relieve accidentado”, indicó Roscosmos.
Está previsto que el vuelo tarde entre “cuatro días y medio y cinco días y medio”, según los datos publicados por Roscosmos y citados por la agencia de prensa oficial TASS.
La nueva estación rusa servirá para probar las nuevas tecnologías de alunizaje, tomar y analizar muestras de la superficie y llevar a cabo investigaciones durante largo tiempo, que incluyen el estudio de la capa superior del regolito en el polo sur de la Luna.
El Luna-25 relanza el programa lunar ruso, que prevé la investigación y uso práctico de la Luna y la órbita lunar por parte de estaciones orbitales.
La última misión lunar de la Unión Soviética había sido la de la sonda espacial Luna-24, en 1976.
Desde la caída de la exURSS, Moscú se enfrenta a una serie de dificultades para innovar en el sector, en el que han surgido nuevas iniciativas privadas, como Space X, del multimillonario Elon Musk.