La Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, la más grande del mundo en letras hispanas que esta edición tuvo como invitada a América Latina y el año próximo tendrá a Madrid, cerró la semana pasada su 30 edición con la visita de 813.000 personas.
El presidente de la FIL, Raúl Padilla, afirmó en rueda de prensa que estiman que por las puertas de la Expo Guadalajara, donde se desarrolló el evento, pasaron “poco más de 813.000 asistentes”, es decir, 25.500 más que en la edición anterior.

Con un balance “a todas luces positivo”, durante nueve días desembarcaron en la ciudad mexicana figuras como Mario Vargas Llosa, Elena Poniatowska, Laura Restrepo, Antonio Gamoneda y Rigoberta Menchú, mientras que en representación de Argentina estuvieron presentes Fabián Casas, Luisa Valenzuela, Gabriela Cabezón Cámara, Andrés Neuman y Mempo Giardinelli, entre otros 30 escritores.

Esta edición, de la que participaron 751 autores de 41 países, rindió homenaje al Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, quien ofreció charlas memorables como en la que expresó que es el “último sobreviviente” del “boom” latinoamericano. “Me toca el triste privilegio de tener que apagar la luz y cerrar la puerta”, dijo.

Además, en el marco del evento literario se entregaron reconocimientos como el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances al rumano Norman Manea, el Sor Juana Inés de la Cruz a la española Marina Perezagua o el de Literaturas Indígenas de América 2016 para el mexicano Jorge Miguel Cocom Pech.

El presidente de la feria destacó que entre las actividades más concurridas estuvieron el evento que George R.R Martin, autor de la saga en la que se basa la serie “Juego de Tronos”, tuvo con sus lectores, y la presentación del último bestseller de James Dashner.

Por su parte, la directora de la feria, Marisol Schulz, puso de relieve el papel que América Latina, invitada de honor, jugó a lo largo de estos días con un programa “vasto y diverso” en el que participaron 120 autores de la región, al tiempo que recordó que en esta edición se buscó “un énfasis muy especial en las lenguas originarias”.

A pocas horas de terminar la última jornada de su 30 edición, se llevó adelante el simbólico cambio de estafeta entre Latinoamérica, representado por el poeta guatemalteco Humberto Ak’Abal, y Madrid, en cuyo nombre acudió a México el coordinador general del Ayuntamiento, Luis Cueto.

De esta forma, la capital española se convertirá, del 25 de noviembre al 3 de diciembre de 2017, en la segunda ciudad, tras Los Ángeles (Estados Unidos.), en ser nombrada invitada de honor.