La Suprema Corte de Justicia bonaerense adquirió formalmente el complejo edilicio integrado por las casas patrimoniales “Villa Devoto” y “Villa de Bary”, ubicadas en Buenos Aires al Nº 2285 y Nº 2247, respectivamente, a unos 100 metros de la sede central de Tribunales. 

“La compra de estos bienes permitirá la instalación de órganos judiciales, salas de audiencias, un centro de capacitación, biblioteca, oficinas complementarias y sectores multiuso, entre otros espacios”, indicó el máximo tribunal a través de un comunicado. En principio, no hay plazos para la ocupación de los inmuebles ni se sabe cuánta inversión demandará ponerlos en condiciones para su uso.

Desde la Corte aseguraron que la incorporación de estas propiedades “estrecha la relación con la comunidad y custodia el valor patrimonial e histórico de la ciudad”. Esto motivó la rúbrica de un convenio de trabajo con la comuna para desarrollar “actividades culturales, de interés general y vinculadas a la historia y la preservación del patrimonio en ambas fincas”.

En lo atinente al servicio de Justicia, este acervo ofrece respuesta a la “imperiosa necesidad de avanzar en soluciones concretas y a corto plazo dirigidas a contar con nuevos entornos para la ubicación de dependencias judiciales”, en un contexto que incluyó, desde el 2014 a la fecha, “17 pedidos públicos de ofertas sin respuestas y la falta de ofertas en múltiples búsquedas directas en la ciudad”. 

Atendida con créditos presupuestarios propios de la Jurisdicción Administración de Justicia, las compras contaron con las tasaciones oficiales de ARBA y la Fiscalía de Estado; la intervención previa de la Contaduría General y Tesorería General de la Provincia; y con la escritura por parte de la Escribanía General de Gobierno. Con estas adquisiciones, la Administración de Justicia integra dos superficies por un total de 2814 metros cuadrados. 

Según explicaron, “la ampliación arquitectónica estratégica es sin perjuicio del plan de construcción del Complejo Judicial en el predio ubicado en Juan B. Justo y Pehuajó, para lo cual se contempla una reformulación del proyecto original comprensivo de las características actuales en materia de gestión judicial”. En particular, “a partir de la consolidación del uso de medios y recursos tecnológicos, tanto a favor de la labor de magistrados, abogados y personal judicial, como del acceso a la justicia de los ciudadanos”.  

Al respecto, Sergio Torres, presidente de la Suprema Corte bonaerense, aseguró: “Hoy es un día muy especial para el Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires. En un marco académico y humano muy valioso dado por el IV Congreso de la Magistratura y la Función Judicial, estamos tomando posesión de estos inmuebles en la bella ciudad de Mar del Plata. Queremos agradecer al municipio, al Concejo Deliberante, a funcionarios y funcionarias de la Suprema Corte y a todas las personas que trabajaron para que fuese posible”.  

Y agregó: “La idea es que estos espacios no solo sean destinados a oficinas judiciales, sino que puedan ser transformados en sitios democráticos de encuentro, de capacitación; donde todos los jueces y juezas de la provincia puedan venir e intercambiar proyectos y experiencias”.

Por su parte, el ministro Daniel Soria adelantó que en las casas patrimoniales se instalará “el primer centro provincial de capacitación judicial para coordinar las actividades de formación que tan bien realiza el Ministerio Público y la Administración de Justicia del Poder Judicial Provincial y también las que próximamente llevará aquí adelante la Escuela Judicial del Consejo de la Magistratura”. 

Por último, el intendente Guillermo Montenegro destacó la “generosidad” de la Suprema Corte por haber elegido la ciudad y “tomar la decisión de adquirir estas residencias y hacerlo con un pensamiento abierto para transformarlas, además, en un lugar de capacitación”.

“Como vecino y como intendente quiero agradecer la confianza depositada para que pudiéramos acompañar este proyecto donde se ha conjugado todo lo bueno”, finalizó.