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Cultura 28 de noviembre de 2016

Grandes libros, pequeños lectores

Por Laura Andrea Blanco // Integrante de la ONG Jitanjáfora

Liliana Bodoc, Ondinas.
Serie Elementos. Alfaguara, 2015.
Historias de agua

Según el alquimista Paracelso, existían seres creados para proteger los cuatro elementos de la naturaleza: las Salamandras eran espíritus encargados del fuego; los Silfos, del viento; los Gnomos, de la tierra y las Ondinas, del agua.
En la serie Elementos, Liliana Bodoc explora su creatividad en torno a estas fuerzas que rigen el equilibrio del mundo.

Pero el título no debe engañarnos. Los textos que componen estos cuatro libros no mencionan una sola vez a esos personajes mitológicos aunque su fuerza habite cada relato.

El libro Ondinas abre con un poema sobre las formas del agua y cierra con “Cuento en remolino” en el cual la disposición de las palabras sobre la hoja acompaña como en un caligrama las vicisitudes de la protagonista. El lector deberá caer en la textualidad para llegar al final.

Entre esos dos extremos, ocho cuentos de carácter realista, narran las historias de personajes en diferentes tiempos y latitudes hilvanadas por un leit motiv común: el agua. Por momentos pareciera que este elemento es el testigo de los acontecimientos, como en “El río estuvo allí”, donde el fluvial deja de ser un escenario para convertirse en un punto de vista.

Con el registro poético propio de la autora, las palabras apelan a la sensibilidad del lector así como también las temáticas que atraviesan el libro. Conviven en él lloronas falsas y verdaderas, esclavos y pintores buscando la libertad, niños que descubren que jugar con agua puede ser más peligroso aún que jugar con fuego, marineros, monjes e inmigrantes rumanos.

El agua contempla sus vidas simples y peculiares y nos acerca instantáneas de sus pasiones.
Habrá que alejarse de la orilla e internarse en las profundidades de cada relato para poder disfrutarlo. No deje de perderse entre sus cauces sin tanque de oxígeno ni chaleco salvavidas. La fuerza de las Ondinas hará que salga purificado.



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