La adolescente de 16 años que el domingo a la madrugada denunció haber sido violada durante un cumpleaños en la localidad de Miramar ratificó sus dichos en la cámara gesell y complicó de esa manera la situación del detenido, un año mayor que ella. .

El fiscal Walter Martínez Soto encabezó la audiencia en la que la menor, bajo las cuidadas condiciones que prevé el proceso judicial, prestó declaración para narrar lo vivido en la celebración de un cumpleaños de 15 en el club Amigos Unidos.

Si bien se preservan todos los detalles de su comparecencia, pudo saberse que la víctima limitó la agresión sexual denunciada solo al adolescente detenido y no a su primo de 16, que quedó automáticamente desvinculado. Vale recordar que ambos menores habían sido “rescatados” por la policía cuando otros asistentes al cumpleaños, al enterarse de lo sucedido, quisieron lincharlos.

La declaración de la menor fue en el mismo sentido de la denuncia interpuesta por su madre en la madrugada del domingo. Dijo que había asistido al cumpleaños y que en un momento se empezó a sentir confundida, por lo que atribuyó esa situación a que alguien le colocara alguna sustancia en su bebida.

Luego dijo no recordar mucho y solo que se vio fuera del salón, para luego al despertarse una vez que ya había sido abusada. Fue en esas circunstancias que vio alejarse a este joven al que pudo identificar por su nombre.

Poco antes de las 4 de la madrugada del domingo la madre de la menor llegó hasta el club de avenida 9 y calle 76, alertada por un ex novio de su hija. Al hacerlo y enterarse de lo ocurrido la trasladó hasta el hospital para que le brindaran asistencia, a la vez que llamó a la policía para que detuviera a los acusados.

Según explicaron las fuentes consultadas por este medio, este miércoles también declaró el menor detenido, quien en una ampliación de su comparecencia inicial insistió en que las relaciones sexuales que tuvo con la denunciante fueron acordadas y voluntarias.

Ahora el fiscal Martínez Soto aguardara los resultados de los estudios toxicológicos sobre la muestra de sangre de la menor. “Está claro que si a la chica le suministraron algo su consentimiento pudo estar viciado. Pero más allá de ese punto, de lo que no hay dudas es del informe médico en el que se constataron lesiones compatibles con una agresión sexual”, puntualizó una fuente consultada por este medio.