Por Marcelo Pasetti

Exactamente dentro de un año, Mar del Plata celebrará el 150° aniversario de su fundación. El 10 de febrero de 2024 caerá sábado. Con un extra que invita a soñar en grande: el lunes 12 de febrero y el martes 13 de febrero del año próximo serán los feriados de Carnaval. En definitiva, un fin de semana extralargo que sería ideal para diagramar una programación por el aniversario de la ciudad que podría convocar a miles y miles de argentinos. Una fiesta marplatense única, para el recuerdo y para la que debería comenzar a trabajarse en lo inmediato, teniendo en cuenta que se convertiría en la posibilidad de tener un “enero bis” en la ciudad, lo cual a todos beneficiaría.

Asimismo, existe un escollo que debe considerarse y de allí la necesidad de crear una comisión, una asociación o un nucleamiento especial para programar los festejos: el 10 de diciembre de 2023, asumirá el nuevo intendente. Puede ser el actual, Guillermo Montenegro, en caso de ir a la reelección y ganar la elección, o puede ser otro.

Sería imposible diagramar un programa de interés si se comienza a trabajar cuando asuma el nuevo gobierno. A menos de dos meses del aniversario, ya estarían completas las agendas de los artistas, al tiempo que las instituciones locales estarían enfocadas en la temporada.

Mucho hay por hacer. Y el éxito dependerá de la mancomunión entre el sector público y privado.

“Si el aniversario fuese hoy, se podría diagramar un programa de festejos de cinco días, desde el viernes 9 hasta el martes 13, con un sinfín de atractivos que pueden ir desde recitales gratuitos con las principales figuras de la música hasta competencias deportivas, desde desfiles hasta shows de acrobacia aérea o espectáculos de luces sobre el mar“, resaltó un funcionario del Ente Municipal de Turismo.

¿Por qué no pensar para esos días un menú con un precio especial en los restaurantes, una promoción para contratar cuatro noches en un hotel y obtener una quinta libre o descuentos en los teatros? A propósito, el empresario y productor teatral Carlos Rottemberg, un enamorado de la ciudad, ya piensa en el próximo verano con una programación especial que acompañe el aniversario redondo. Y, en tal sentido, ya mantiene conversaciones con varios productores. Incluso, como lo adelantó en charla con LA CAPITAL, el imitador y showman Martín Bossi, el humorista Roberto Moldavsky, y las comedias “Inmaduros” (con Adrián Suar y Diego Peretti) y “Brujas”, con el elenco original (Moria Casán, Nora Cárpena, Thelma Biral y Graciela Dufau) podrían ser parte del menú de espectáculos comerciales del año próximo.

Rottemberg, el “adelantado”, ya dio el puntapié inicial. Los 150 años de Mar del Plata están a la vuelta de la esquina.

La torta gigante

La edición de LA CAPITAL del lunes 11 de febrero de 1974 (ejemplar que costaba un peso) reflejó lo vivido en los actos por el 100° aniversario. “Una brillante celebración tuvo el Centenario de Mar del Plata”, reflejó el título principal. Además, reseñó que la torta gigante de seis metros de altura y dos toneladas de peso fue el objeto principal de todo el desfile de carrozas llevado a cabo en el homenaje al Centenario de Mar del Plata.

“Con gran atraso se cumplió el acto ya que el público, apiñado como pocas veces, pugnaba por ver de cerca el símbolo de los 100 años. Fue una verdadera manifestación popular realizada en medio de algunos inconvenientes que, sin embargo, no empañaron la fiesta. Luego, se concretó un gran espectáculo en el Parque Municipal de Deportes“, se detalló.

Por una indisposición, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Victorio Calabró, no concurrió a la mañana a los actos centrales realizados en plaza Colón, en homenaje al fundador de Mar del Plata, Patricio Peralta Ramos. En su lugar, asistió el ministro de Gobierno, doctor Alberto Rocamora, junto a Celia Lértora Bouchez de Peralta Ramos, nieta del fundador de Mar del Plata, y el intendente, Luis Nuncio Fabrizio.

La espectacular torta, un ícono de la celebración del Centenario de Mar del Plata.

En el acto, pronunció una alocución el obispo de Mar del Plata, monseñor Eduardo Francisco Pironio, quien agradeció a Dios por una diversidad de dones otorgados para dar a la ciudad centenaria la fecundidad a sus tierras, la riqueza a su mar, la fe, la capacidad de esfuerzo e inteligencia a sus hombres. Finalmente, le hizo entrega al intendente Fabrizio de un libro que contenía las conclusiones de las Conferencias de Medellín “con la esperanza de que su luz ayude a la construcción de un mundo nuevo sustentado en la justicia, el amor y la paz”.

En tanto, el entonces intendente dijo que “hemos visto que en esta época de los pueblos, Mar del Plata es no ya el balneario tradicional, sino, con satisfacción, con entusiasmo de argentinos, el balneario del pueblo argentino, es el balneario de los hombres de trabajo”.

Al tiempo que en el Hotel Provincial fueron agasajados los cien vecinos más antiguos de la ciudad, el 10 de febrero de 1974, bajo la llovizna, la torta del Centenario fue paseada dificultosamente a lo largo de la desbordante avenida Juan B. Justo hasta el Parque de Deportes.

“El intendente y su señora esposa fueron levantados con una grúa de Agua y Energía sobre la pala mecánica y acercados de esa forma a la torta. El jefe comunal cortó el primer trozo y se lo ofreció a su esposa ante el aplauso de miles de personas agrupadas en ese sector”, detalló la crónica. Incluso se mencionó que “al comenzar el intendente a cortar la torta, desde algún lugar se elevó la entonación coreada por numerosas gargantas de ‘Cumpleaños Feliz’. Momentos después, un grupo de jóvenes comenzó a cantar la Marcha Peronista“.

Luis Nuncio Fabrizio, intendente en 1974, y Teodoro Bronzini, con el obispo diocesano, monseñor Eduardo Pironio, durante los actos por el Centenario de la ciudad.

La crónica de los festejos y la torta incluía un párrafo risueño. “En uno de esos apretujones, cuando la carroza con la torta ingresaba al Parque de Deportes -se detalló- se vio a un conocido publicista marplatense poco menos que estrellado con la misma. Cuando pudo rehacerse, sin perder mayormente el buen humor, el conocido publicista empleó unos cuantos minutos en desprenderse de la crema que tenía en la cara, en los cabellos, en las manos, en la ropa, por todo el cuerpo. Lo más parecido a la película de ‘Los tres Chiflados'”, se indicó.

Cosas de aquellos días

Los avisos publicitarios de la época nos permiten obtener algunos apuntes de aquella Mar del Plata de 1974. Por ejemplo, “La feria de la pilcha”, en Santa Fe 1740, ofertaba pantalones a 39,90; bikinis a 29,90; camisones a 28,90 y corpiños a 9,90 y en LA CAPITAL se anunciaba un recital de Aquellare a la 1.15 en el teatro Atlantic.

En el cine Ambassador se proyectaba “Los optimistas” de Peter Sellers al tiempo que Estela Raval, José Marrone y Gogó Andreu presentaban “Colitas de verano” en el Neptuno.

En aquel verano del 74, en el teatro Colón, en dos funciones, se podía disfrutar de la obra “El hombre piola”, con Luis Sandrini, Malvina Pastorino y Mercedes Carreras, mientras Aníbal Troilo se presentaba en La Campana de Rivadavia 2336 y Roberto Goyeneche en Caribean, de Entre Ríos 2121.

Numerosos actos se concretaron el 10 de febrero de 1974, cuando Mar del Plata cumplió 100 años.

Las fiestas del Cincuentenario

El 10 de febrero de 1924, se celebraron los actos por el Cincuentenario de Mar del Plata, con una atractiva programación que arrancaron el sábado 9 con la Banda Municipal recorriendo las calles y realizando salvas de cañonazos. Por la noche, se procedió a la iluminación de la avenida Luro en el trecho comprendido entre la avenida Independencia y la Rambla Bristol, fuegos artificiales en la plaza Rocha, “música por la Banda Municipal y biógrafo al aire libre”.

El 10 de febrero, fecha del aniversario, arrancó con “diana por la banda y salva de cañonazos”, así como desde las 6 hasta las 10 se desarrolló una carrera de automóviles y otra de motocicletas en el circuito Mar del Plata-Los Ortiz. “Al propio tiempo -se anunciaba en el diario-, tendrán lugar algunas pruebas de aviación, viajes con pasajeros y números de acrobacia en el aire”. En tanto, en la Bristol, hubo carrera de sandolines (botes de rescate), caza del pato y palo jabonado cerrándose el acto con desfile de lanchas pesqueras.

“A las 21 -se añadía- recepción en la casa municipal y entrega de medallas y pergaminos a todas aquellas personas que llevan cincuenta años de vida permanente en la ciudad. Iluminación de la avenida Luro, desfile de rodados y corso de flores y fuegos artificiales en la plaza Luro”.

Numerosos actos se concretaron el 10 de febrero de 1974, cuando Mar del Plata cumplió 100 años.

El lunes 11 prosiguieron los festejos por los 50 años de Mar del Plata organizados por la comisión presidida por Victorio Tetamanti, que en los días previos invitaba “a todos los que deseen tomar parte en la doma de potros y carreras de sortija a que se presenten el día lunes de 15 a 17 en la Playa Grande. Se solicita también a los estancieros que posean, faciliten potros para la doma”, podía leerse en el comunicado publicado en LA CAPITAL por la comisión.

Ese lunes se procedió a “designar una calle de la ciudad con el nombre de su fundador, don Patricio Peralta Ramos”, mientras que de 10 a 12 se desarrollaron “tres carreras de natación para aficionados, señoritas y profesionales en la Rambla Bristol. Por la noche, iluminación de la avenida Luro, fuegos artificiales en la plazoleta Mezquita y “biógrafo al aire libre de la misma plaza”.

La mosca y sus peligros…

Párrafo aparte para las películas proyectadas, cuyos datos aparecen en un artículo publicado antes de las celebraciones. “La facultad de Medicina de Buenos Aires -podía leerse- ha ofrecido a la Comisión del Cincuentenario la exhibición de algunas películas de divulgación científica para ser pasadas en público durante los días de los festejos”. Y se añadía: “La facultad ha enviado ya el operador con todos los implementos y máquinas necesarios. Las cintas que se van a pasar se denominan ‘La mosca y sus peligros’ y ‘Evitemos la tuberculosis’”.

En aquel Cincuentenario, también hubo un “campeonato reducido de football” con la participación de River Plate, Sportivo de Almagro, Barracas Central, y Gimnasia y Esgrima de La Plata. Desertaron San Lorenzo, Independiente y Racing, “los cuales no pudieron formar sus cuadros debido a la ausencia de varios de sus buenos elementos”.

Entre los hechos salientes de la celebración, según la crónica de LA CAPITAL, “lo que llamó mucho la atención del público fueron los números de gimnasia por el escuadrón de seguridad. Los pases del escuadrón divididos en dos filas, los ejercicios de lanza, las flexiones, de pie sobre los caballos, los cruces de cabalgadura, la caída de los caballos y la carga de lanza fueron hechos con toda corrección”, se consignó finalmente.