La Cámara de Apelaciones consideró que no hay pruebas suficientes contra los dos hombres que se encontraban detenidos por el asesinato de Luis Miguel Gómez, ocurrido en agosto en el barrio Juramento, y ordenó que fueran inmediatamente liberados.

De esta manera, los jueces Adrián Angulo, Raúl Paolín y Pablo Poggetto dieron lugar a los reclamos de las defensas de Daniel Alejandro Conturso, quien estaba imputado por el homicidio, y Ariel Cuello, acusado de encubrir lo sucedido al dar información falsa a la policía.

A pesar de que Conturso y Cuello fueron liberados, y que un nuevo sospechoso sin identificar podría ser el asesino de Gómez, ambos hombres seguirán imputados y en la investigación de Andrea Gómez.

Aún faltan los resultados de los análisis de los celulares de Conturso y Cuello, algo que podría arrojar cierta luz para determinar si participaron o no del crimen del repartidor de viandas.

Cabe recordar, que por el hecho también estuvo detenido Jonathan Eibar, a quien Cuello había señalado como la persona que disparó contra Gómez y que, tras desestimar las pruebas en contra, fue liberado de prisión.

El crimen

El crimen de Gómez se produjo en un contexto de narcomenudeo, en la zona de Benito Lynch y Lanzilota. La pesquisa policial no tuvo dudas sobre el propósito de Gómez ese 3 de agosto para tomar la bicicleta y salir de su casa hacia lo de Conturso. Según esas averiguaciones, la intención de Gómez era comprar drogas y de paso recuperar unos recipientes en los que su esposa preparaba viandas a Conturso.

Gómez recibió un disparo en la parte lumbar y regresó a su casa, donde, mal herido le avisó a la mujer que le habían disparado. “Me pegaron un tiro… fue el Sanjua”, alcanzó a decir antes de desplomarse. “Sanjua” era justamente el apodo de Conturso. Luego de eso fue derivado al HIGA donde murió días después.

A pesar de estas últimas palabras de la víctima, los primeros pasos de la investigación se orientaron hacia Eibar en función de algunos relatos en el barrio y, principalmente, de los dichos de Cuello, un hombre que se hallaba con pulsera monitoreada por estar cumpliendo arresto domiciliario.

Por ese motivo la Justicia consideró sólida la prueba contra Eibar y lo mandó a detener. Al declarar, Eibar negó haber sido el autor y a medida que se agregaron otros testimonios lo que parecía una declaración exculpatoria terminó siendo veraz. A la vez, se profundizó en el entorno de Contuso y Cuello.

En noviembre, Conturso y Cuello fueron detenidos. Y en sus declaraciones, volvieron a decir lo mismo que cuando fueron testigos: que no fueron, que no participaron y que hubo otra persona, a la que no conocían, involucrada.

¿Inocentes detenidos?

La defensora de Cuello, al apelar la detención, explicó que en base a la investigación, que su defendido no cometió el hecho que se le acusa. Además, explicó que nunca dijo haber visto el momento en que se efectuó el disparo y tampoco quién lo hizo -el hecho de que estuviera siempre adentro de su domicilio explica tal circunstancia- y solo manifestó lo que vio o percibió por sus sentidos.

Además, la defensora explicó que no hay relación ni motivo para que Cuello quisiera proteger a Conturso

“Este chico, Jonathan (Eibar) se encontraba en la vereda de mi casa y salió corriendo para la esquina y volvió diciendo ‘le di, le di’. En ese interín yo sentí una detonación”, había declarado en su momento Cuello.

Sin embargo, nunca se pudo probar que Eibar le haya disparado a Gómez y, por eso, se habla de otra persona -sin identificar- que estaba en esa cuadra y que se pudo haber enfrentado con Eibar y matado a Gómez “por error”.

Por otra parte, en cuanto a las últimas palabras de la víctima: “Me pegaron un tiro… fue el Sanjua”, esto tampoco se pudo probar y la conclusión a la que se ha llegado es que pudo haber dicho eso por ser Conturso el último hombre al que vio antes de recibir el disparo.

“Debe señalarse que de un minucioso estudio de la investigación, al menos con lo obrado de momento, no se logra construir la hipótesis desarrollada por el Ministerio Público Fiscal que culmina con la descripta imputación hacia el encausado Daniel Alejandro Conturso alias ‘El Sanjua'”, concluyeron los jueces Angulo, Paolín y Poggetto.