por Susy Scándali

Este es el primer Festival Internacional de Cine de Mar del Plata para el productor Alejandro Cacetta como presidente del Instituto de Cine y Artes Audiovisuales -Incaa-.

Productor de títulos tan disímiles como exitosos -“Elefante blanco”, “Corazón de león”, “Un novio para mi mujer”-, el nuevo titular de ese organismo dejó el Patagonik Film Group para volcarse de lleno del área privada a la pública, con consenso de varios sectores vinculados al séptimo arte.

Luego de una reunión con el empresario Florencio Aldrey -en su calidad de anfitrión-, el titular del Incaa mantuvo en el NHGran Hotel Provincial un extenso diálogo con LA CAPITAL, donde el primer tema abordado fue el de los cambios que está produciendo en el organismo.

“Hay un cambio que es paradigmático -indicó- y que está planteado en no considerar la producción como un fin en sí mismo sino que lo que debiéramos lograr es que se difundan y se exhiban todas las películas. Hemos logrado una calidad y una variedad de cine, que lo que necesitamos es pensar hacia dónde va ese cine en cuanto a la exhibición A veces me parece que debiéramos replantear las distintas pantallas a donde van determinadas producciones y no quiere decir que sean producciones que a lo mejor no generen un interés en el público, tal vez debiéramos analizar si no tendríamos que tener otras pantallas, entonces ese cambio paradigmático es importante y el otro es acompañar el fomento desde el desarrollo, desde el desarrollo del guión, desde el desarrollo del proyecto en sí mismo, los cortometrajes, donde antes no teníamos un plan sistemático que le diera previsibilidad al realizador y al productor, que pudiera tener la posibilidad de ir realizando y generando distintos pasos. Más allá que pueda haber gente que se dedique al cortometraje y exclusivamente sea esa dedicación,y bienvenido sería también. Entonces esos cambios son muy paradigmáticos y claros respecto a lo que teníamos.

– Cuando usted habla de otras pantallas, ¿se refiere a otros países?…porque en la Argentina bajó mucho la cantidad de gente que va al cine, un ejemplo de esto es haber puesto hace una semana una entrada barata para que la gente pudiera ir…

– Sí, pero no bajó mucho la cantidad de gente que va al cine. Comparando con el año pasado no es mucho, realmente si lo ves posiblemente quede igual o un poquito menor a la gente que va, pero el porcentaje de películas argentinas que la gente fue a ver respecto al total, este año creció respecto al año pasado, con lo cual todos los ratios pueden llegar a ser engañosos y no totalitarios en el análisis, por eso hay que tener en cuenta un análisis global de esa situación. Pero cuando hablo de otras pantallas no tiene que ver con otros países sino justamente hablar no sólo de salas cinematográficas sino de plataformas digitales, televisión, Odeón por ejemplo…

– ¿Qué cambios se van a producir en Odeón?

– Odeón está muy, muy firme, estamos cambiando algunas cosas de la plataforma, que ya se empezaron a ver, tuvo un crecimiento muy grande, pero no me gustaría dar tanto detalle porque venimos con un cambio mayor que le va a dar una sustentabilidad mucho más grande de la que tenemos hoy, va a haber lugar para poder tener estrenos, es como si hubiera una sala digital, en vez de ver la película en el cine, podrías ver la película en Odeón pagando una entrada que es un click, que es lo que se llama video a demanda transaccional. Lo de Odeón va a ser muy firme y va a acompañar dentro de las pantallas públicas que hay, en una forma integral a las realizaciones tocando pantallas publicas como Incaa TV, Odeón, Espacios Incaa, los cines comerciales y otras pantallas también como la Casa del Bicentenario…

– Usted menciona los Espacios Incaa, pero Mar del Plata, siendo sede del único Festival Internacional de Cine Clase A de toda Latinoamérica, paradójicamente no cuenta con un Espacio Incaa…

– Me parece que va a haber algún anuncio para el cierre del Festival…Lo que pasa es que cuando uno habla del Espacio Incaa queda como que el espacio es del Incaa y en realidad no es así, lo que hace el Incaa es ayudar a la digitalización con un comodato determinado y lo que hay que coordinar es la programación de ese cine y darle lugar a que el empresario que es el dueño de la sala tenga sustentabilidad también. Entonces es un lugar de trabajo mancomunado y conjunto…

– ¿Sería entonces en una sala comercial?

– Sí, sí…o no…depende el lugar. Se está trabajando fuertemente en eso.

– ¿Incaa TV va a mantener su impronta?

– Incaa TV tuvo un cambio de programación grande que tiene que ver con tener ciclos, que a determinada hora sepamos que vamos a buscar determinado tipo de películas. Por ejemplo a determinada hora vemos documentales, a otra hora podemos ver otra cosa…hay un ordenamiento de grilla pero también en la calidad de lo que estamos programando, Incaa TV tuvo un crecimiento muy grande y un cambio en el contenido cualitativamente positivo. Estamos yendo hacia el HD para tener una imagen mucho mejor y tener una sinergia con el resto de las pantallas, que es Odeón y las pantallas de salas, las tradicionales.

– Usted ingresó al Incaa con un gran consenso, eso supone un respaldo…¿este respaldo le ha servido para producir un cambio grande o no había necesidad.

– Bueno, los cambios grandes o chicos depende de quién los vea, yo creo que hemos hecho muchos cambios, digo cambios paradigmáticos como te decía, de repente el plan de fomento pensado en la difusión, internamente una reestructuración distinta de las áreas del Instituto. Una de las cosas es la sinergia con la que trabajan hoy todas las gerencias del Instituto que la verdad que no existía, y hoy tenemos una transversalidad en lo que estamos haciendo, por ejemplo pensar y hablar de federalización o federalismo, tiene que ver hoy con todas y cada una de las gerencias, no pensando solamente en una determinada gerencia o determinado grupo de gente trabajando para el federalismo, sino que tiene que ser transversal a toda la acción del Incaa. Esos son cambios paradigmáticos realmente importantes, creo que realmente son grandes, el tema de toda la digitalización y lo que estamos haciendo en los procedimientos internos, donde es un Instituto que tiene muchas responsabilidades, muchas actividades, con una industria que ha crecido y se ha desenvuelto muy fuertemente en el transcurso de los últimos años pero que el Instituto no acompañó en el desarrollo tecnológico, entonces estamos yendo a ese cambio ..

– Un cambio económicamente costoso…

– Cuesta dinero. Todo cuesta dinero. Cuesta seguir haciéndolo igual como cuesta también cambiarlo. Pero los beneficios son muchos más grandes después de hacerlos. Entonces es cómo invertir, es la calidad de la inversión y no la cantidad. El dinero puede ser el mismo, hay que ver cómo se administra, qué es lo que se ahorra y qué se deja de malgastar. No malgastar porque se usaba mal sino que el malgasto tiene que ver con algo que tiene que ser superador hacia el futuro.

– Este Festival siempre ha tenido una fuerte impronta latinoamericana, eso se mantiene este año…

– Sí, ya venía con esa impronta, José Martínez Suárez tenía esa visión y yo no sólo la comparto sino que la apoyo y creo que tenemos que hacer más hincapié en eso. Realmente la idea es ser el faro de Latinoamérica, porque si bien somos el único festival clase A de la región tenemos once festivales y cada festival debiera tener su sello. Y yo creo que el nuestro es ser el faro de Latinoamérica. Y en eso es que toda la cinematografía del mundo pueda venir a abrevar en el Festival de Mar del Plata las nuevas películas y las nuevas propuestas artísticas que se hagan en la región.

– Otro sello parece ser la austeridad. No hay grandes estrellas, pero supongo que la idea es reemplazarla con la calidad. En todo caso, ¿qué les responde a los que dicen que nuestro Festival no tiene glamour?

– La verdad que creo que yo creo que un Festival debiera tener una combinación de ambas cosas. Y todo en su justa medida. Me parece que tenemos un presupuesto que tenemos que saber administrar y ver dónde poner cada peso. Esperemos que en el futuro también quieran venir por la calidad de las películas y por la programación. Algo que ya está sucediendo, porque muchos directores vienen por esto justamente. Creo que tenemos que hacer más hincapié en ese punto, en la calidad de la programación y en la calidad de propuestas hacia el público sin ninguna duda, porque un Festival es un gran lugar para generar audiencia, para mostrar películas que a lo mejor no se ven en circuitos tradicionales o comerciales, pero también en charlas y vínculos en la industria. Y eso también se está dando.