A un mes de la implementación de la ordenanza sancionada con la intención de regular la oferta y demanda de sexo en la vía pública de Mar del Plata, el Municipio destaca que se redujo en toda la ciudad la cantidad de personas que ejerce la prostitución y la Secretaría de Seguridad informó que se laboraron 76 infracciones en este tiempo por realizar la actividad fuera del nuevo sector delimitado para la Zona Roja.

A raíz de la normativa y los operativos de prevención que la Patrulla Municipal despliega noche a noche en conjunto con Tránsito y la Policía Bonaerense, en los barrios Don Bosco, Los Andes, Sarmiento, La Perla y los alrededores de la vieja terminal “los vecinos y comerciantes recuperaron la calma y la tranquilidad”, expresaron desde el gobierno local.

En diálogo con LA CAPITAL, el secretario de Seguridad, Martín Ferlauto, expresó: “Estamos muy satisfechos con el trabajo que se viene haciendo. Los operativos de control que se llevan adelante vienen dando resultados muy positivos y en este mes registramos 23 denuncias y labramos 76 actas de infracción, la mayoría de ellas gracias al patrullaje de la Policía y la Patrulla Municipal, que recorre cada noche la ciudad”.

La mayor cantidad de infracciones se concentró en las primeras semanas de vigencia de la ordenanza que rige desde el 24 de septiembre y crece en los fines de semana.

Progresivamente, la presencia de trabajadoras sexuales en la vía pública “fue reduciéndose” y al día de hoy “la actividad es prácticamente nula” en los sectores donde históricamente se ejercía la prostitución.

Vale recordar que las sanciones por no respetar la ordenanza van de los $172.000 a los $861.000, aunque para situaciones más graves la normativa contempla de 5 a 30 días de arresto. Los juzgados de falta serán los encargados de determinar qué infracción corresponde.

“Todos los funcionarios y empleados municipales que estamos trabajando activamente en el tema somos perfectamente conscientes de que estamos llevando adelante una tarea de recomposición histórica para los vecinos”, subrayó el secretario de Seguridad.

Enseguida, el funcionario remarcó sin embargo que “lo más destacado no es el armado de los operativos” sino “la propuesta del intendente Guillermo Montenegro de elevar un proyecto de ordenanza” que “implicó audiencias públicas y un sano debate que llevó a resolver de manera madura que no se puede llevar adelante la oferta y demanda de sexo frente a los domicilios”.

A su entender, la voluntad política del gobierno municipal implicó un acto de “valentía” para dar “una discusión que no fue fácil” y que, según Ferlauto, “constituye una política de no retorno” y de “afianzar la situación de tranquilidad que buscamos para los barrios”, analizó el funcionario.

En el sector de la ciudad donde funcionaba la Zona Roja “ha disminuido mucho la actividad” y “estamos satisfechos” porque “todo se está dando de acuerdo a lo que pensábamos”.

“Estamos hablando de un promedio de poco más de dos actas de infracción por noche, un número muy bajo. En otras épocas solo en la zona de Luro teníamos a 50 trabajadoras sexuales por noche frente a los domicilios”, continuó el secretario de Seguridad municipal.

La nueva zona, vacía

Tras la aprobación de la ordenanza N° 25.590, el Municipio dispuso que la nueva Zona Roja funcione sobre la avenida 10 de Febrero. Sin embargo, las trabajadoras sexuales rechazaron trasladar allí su actividad y se declararon “en rebeldía”.

La nueva Zona Roja de Mar del Plata se autorizó en el sudoeste de la ciudad, en cercanías de donde se encuentran varios hoteles de alojamiento, sobre la avenida 10 de Febrero, que comienza en Mario Bravo y termina en los cementerios Parque y Colinas de Paz, en inmediaciones de los barrios Las Canteras, Nuevo Golf, Santa Celina, Florencio Sánchez y Don Diego, entre otros.

Mientras en las calles de la antigua Zona Roja “se redujo fuertemente” la oferta y demanda de sexo en la vía pública, en la zona habilitada tampoco se registra actividad este tipo.

“Las trabajadoras sexuales decidieron no ir”, dijo Martín Ferlauto y enseguida aclaró: “Nosotros no fijamos un lugar para promocionar la oferta sexual, sino para que aquellas personas que quieran realizar la actividad puedan acerco sin perjudicar a los vecinos”.

Pero, si la prostitución se redujo donde anteriormente se ejercía y no se trasladó a la nueva zona asignada por el Municipio, ¿Qué sucede hoy con la actividad?

De acuerdo con el funcionario a cargo de la cartera de Seguridad, directamente “ha bajado en la ciudad la cantidad de personas que ofrece sexo en la vía pública” y “es prácticamente nula la actividad”.

“Estamos todas las noches y madrugadas recorriendo y patrullando. La problemática se ha reducido muchísimo, pero hay que estar atentos”, agregó.

El funcionario recordó que los vecinos tienen a disposición al línea telefónica 2234368599 para realizar denuncias por incumplimientos a la ordenanza.

“Como todas las leyes, puede haber gente que no quiera cumplirlas, pero hoy hay herramientas para actuar en ese sentido”, agregó.

Volvió la calma

En los barrios que hasta hace poco la oferta y demanda de sexo en la vía pública era moneda corriente, “volvió la calma y la tranquilidad” y “los vecinos lo agradecen”, señalaron desde el Municipio.

Funcionarios y empleados municipales han recibido “múltiples demostraciones de afecto y gratitud” de parte de vecinos que “recuperaron la paz que habían perdido los últimos 25 años”, señaló el responsable de la Secretaría de Seguridad.

A un mes de la implementación de la ordenanza, los vecinos de la ex Zona Roja ya tienen previsto reunirse en la semana para celebrar el cambio generado en estos barrios. “Recuerdo que antes apenas bajaba el sol no podían bajar nuestros abuelos, nuestros niños y uno como adulto tampoco por la violencia que había en las calles por la zona mal llamada roja”, expresa uno de los mensajes enviados al Municipio y señal de agradecimiento.

La zona aledaña a la estación Ferroautomotora recupera su tranquilidad en este sentido, mientras que el Municipio planifica en conjunto con el sector privado una serie de intervenciones y obras que “transformarán por completo” a este sector de la ciudad.