La coalición de derecha y ultraderecha que venció las elecciones italianas del 25 de septiembre y que se prepara para formar un Gobierno con la soberanista Giorgia Meloni como premier dio señales de su primera crisis interna con un cruce público entre la líder de Hermanos de Italia y el referente de Fuerza Italia y cuatro veces premier, Silvio Berlusconi.

La coalición, que espera que la próxima semana el presidente Sergio Mattarella le confiera a Meloni el encargo para formar un nuevo Gobierno, se mantiene en alerta luego de que se difundieran imágenes de supuestas anotaciones del líder de Fuerza Italia en contra de la líder de Hermanos de Italia.

“Le faltó algo: no soy chantajeable”, planteó Meloni a última hora del viernes, luego de que esta mañana trascendieran en el diario Repubblica imágenes que serian de apuntes de Berlusconi que el jueves trataba de “prepotente, arrogante, ofensiva” a la líder soberanista por su negativa a abrir espacios a Fuerza Italia en un eventual gabinete.

La coalición que forman la Liga de Matteo Salvini, Hermanos de Italia de Meloni y Fuerza Italia de Berlusconi había logrado imponer al conservador exministro para la Familia Lorenzo Fontana como presidente de la Cámara de Diputados, con una votación en bloque luego de las divisiones de ayer para elegir a Ignazio La Russa al frente del Senado.

Durante la votación, diputados del centroizquierdista Partido Democrático desplegaron un cartel con la leyenda “No a un Presidente homófobo cercano a (Vladimir) Putin”; en referencia a declaraciones de Fontana durante su paso por el Ministerio de la Familia en 2018 y 2019 contrarias al matrimonio entre personas del mismo sexo y de apoyo al líder ruso.

Con la elección de Fontana, vicesecretario de la Liga, se terminó de conformar el mapa de poder dentro de la coalición luego de que La Russa, de Hermanos de Italia, fuera votado al frente de la Cámara Alta sin los votos de Fuerza Italia, pero con el apoyo de 19 votos de las fuerzas de centroizquierda que aún no fueron reivindicados por ningún partido.

Los diputados habían hecho tres rondas de votación sin llegar a un acuerdo para la presidencia de la Cámara. A partir de la votación de las autoridades de las Cámaras, los 400 diputados y 200 senadores asumidos ayer deberán ahora formar los grupos parlamentarios antes del martes.

Una vez que queden formados los grupos parlamentarios, en un Parlamento en el que la coalición de derecha tiene mayoría en las dos Cámaras, el presidente Sergio Mattarella iniciará una ronda de “consultas políticas” con los jefes de bloque y las autoridades legislativas para decidir a qué figura le da un primer encargo para formar el nuevo Gobierno.

En ese contexto, la diputada Meloni, líder del partido más votado en septiembre, aparece como la más firme candidata para convertirse en la primera mujer premier de la historia de Italia en un Ejecutivo que algunos analistas avizoran como el más de derecha que tendrá el país desde la Segunda Guerra Mundial.

De todos modos, la coalición sigue sin resolver un listado de ministros para proponerle a Mattarella a partir de las disputas entre los tres partidos para hacerse de carteras clave como Interior, Justicia y Exteriores.

En ese marco, la decisión de la mayoría de Fuerza Italia de no votar a La Russa para presidir el Senado fue vista por la prensa italiana como una nueva instancia de negociación para que el partido de Berlusconi logre el Ministerio de Justicia y el control de la televisión estatal, dos de sus reclamos.

En caso de que, como se prevé, Mattarella encargue a Meloni la formación de un Gobierno entre el 20 y el 21 de octubre, la líder de Hermanos de Italia deberá proponer el listado de ministros para la aprobación del mandatario antes de jurar en su cargo.