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Arte y Espectáculos 14 de octubre de 2022

Sergio Olguín: “El policial negro soporta cualquier variación que a uno se le ocurra”

El escritor participará del ciclo "Conversaciones" en la Feria del Libro de Mar del Plata en el que se referirá a su diversa obra, con foco en la exitosa saga que tiene como protagonista a Verónica Rosenthal.

Sergio Olguín está trabajando en una nueva novela diferente al universo de Verónica Rosenthal. Foto: Florencia Downes/dl.

“El policial negro es lo suficientemente amplio como para que soporte cualquier variación que a uno se le ocurra”. Sergio Olguín no solo lo dice en una nota, lo demuestra en cada una de sus novelas, con personajes e historias tan disímiles como su perverso teniente coronel Augusto Vidal y el impacto que tendrá en las vidas de su hijo Pedro y su esposa Fátima en “1982”, hasta la ya famosa, inteligente, compleja e irreverente periodista Verónica Rosenthal, pasando por Adrián (“Lanús”) y Julio Andrada (“Oscura monótona sangre”), los hombres de barrio que viven de forma tan diversa su -también dispar- ascenso social, por mencionar solo algunos ejemplos. Por eso no tiene reglas a la hora de escribir.

También periodista y guionista, Olguín estará hoy en Mar del Plata participando del ciclo “Conversaciones”, en el marco de la Feria del Libro que se está desarrollando en el Centro Cultural Estación Terminal Sur del Paseo Aldrey. Este encuentro con el escritor, quien será entrevistado por Martín Kobse, será a las 18.30 en la sala José Hernández.

Antes de su llegada a la ciudad, el autor adelantó en una charla con LA CAPITAL que está trabajando en una nueva novela diferente al universo de Verónica Rosenthal, aunque su alter ego -o ese periodista que le hubiese gustado ser y que creó en la ficción- está, por decisión propia y por reclamo del público, siempre presente entre sus proyectos.

– ¿Cómo estaría hoy Verónica volcando sus investigaciones periodísticas? ¿La imaginás en lo audiovisual? No me la imagino en redes. ¿Cómo creés que se adaptaría al complicado mundo del periodismo actual?

– Verónica es una periodista algo anacrónica. Se sentiría más cómoda en los ’60 o ’70 que ahora. No se lleva bien con las tecnologías (le llevó tres novelas descubrir el WhatsApp, no usa redes sociales, etcétera). Verónica escribe y publica en medios. No la veo escribiendo un libro. A regañadientes puede aceptar pasar del papel al digital, pero no le pidan que haga un videíto para promocionar la nota porque se va a fastidiar. Y no es una persona a la que se puede fastidiar gratuitamente.

– En “La mejor enemiga” profundizás la relación de Verónica con sus abuelos, su infancia. ¿Le sigue reconstruir el lazo complejo que mantiene con su padre?

– Sí, me gustaría escribir sobre el vínculo entre ellos, pero también quisiera profundizar más en la personalidad de Aarón. Creo que ella se parece a su padre mucho más de lo que imagina. Creo que si vemos a Aarón joven, se van a notar esas similitudes.

– En una nota anterior me dijiste que tenés pensado llevar a Verónica Rosenthal a Suecia en el futuro. Pero antes, ¿en qué otros líos se va a meter?

– Yo no pienso tanto en Verónica como un personaje de casos delictivos, sino como alguien que tiene una vida personal complicada. Y eso lo tengo más claro que lo policial. No sé en qué historias policiales puede meterse (aunque algunas las tengo en gateras) porque me interesa más saber qué va a pasar con sus vínculos: con su padre, sus hermanas, Federico, los demás hombres o mujeres de las que se puede enamorar, la maternidad, el adiós a la juventud, etcétera. Esos son los temas que me interesa mucho desarrollar.

– ¿Seguís con varios proyectos en paralelo?

– Siempre escribo una novela a la vez. Me sería imposible trabajar en dos proyectos de ficción en paralelo. Los personajes se me mezclarían, o peor, no terminaría de desarrollarlos en la profundidad que me interesa. En cambio, sí puedo trabajar en más de un guion o en un guion y una novela. Por esa razón postergué la escritura de la próxima Verónica Rosenthal. Estoy escribiendo una novela ajena a su mundo.

– ¿Cómo marcha el guion de “Las Extranjeras”?

– Terminé la segunda versión y fue aprobada por los productores (Haddock Films en Argentina y Warner en Estados Unidos), así que ahora hay que esperar a que ellos avancen con el proyecto. Estoy contento con el resultado porque me animé a desarmar la novela y dejé solo lo que podía servir para una película.

– Con “Los hombres son todos iguales”, volviste a los cuentos -al menos a publicar- después de mucho tiempo. ¿Cómo te resultó volver a ese género?

– Escribí una primera novela (ya perdida) en la adolescencia, después seguí con cuentos y mucho tiempo después me animé con la que es mi primera novela publicada, “Lanús”, que tiene una estructura (al menos en los primeros capítulos) bastante similar a una serie de relatos. Sin embargo, hoy, me resulta más difícil escribir narrativa corta que novela. Me siento mucho más seguro en las historias de largo aliento, aunque siempre vuelvo al cuento, como una especie de regreso a los orígenes. La ficción corta tiene la virtud de que uno puede compartirla más pronto con los lectores. Siempre hay una antología, un suplemento cultural donde publicarla y ese contacto casi inmediato me resulta muy atractivo.

– ¿Tenés pensado algún otro proyecto relacionado con lo juvenil?

– En realidad, acabo de reeditar “El equipo de los sueños” en Grijalbo y en febrero sale también “Springfield” en la misma editorial. Son mis dos novelas juveniles y siempre tengo en mente escribir una tercera, pero voy postergando el proyecto. Me gusta la literatura juvenil y moverme en los límites del género. Seguramente, voy a escribir al menos una novela más.

– ¿Te autoimponés reglas a la hora de escribir en cuanto a códigos del género policial/negro?

– No, ninguna. Trato de que las novelas no tengan la misma estructura, especialmente las de Verónica. Lo demás todo puede ser puesto en duda, cambiado, ignorado o puesto en evidencia. El policial negro es lo suficientemente amplio como para que soporte cualquier variación que a uno se le ocurra.

La agenda de la Feria del Libro de Mar del Plata