CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
Arte y Espectáculos 23 de septiembre de 2022

Carlitos Balá y su romance con Mar del Plata

Durante más de seis décadas, fue uno de los personajes centrales de la temporada marplatense. Era común verlo en Playa Grande durante el verano o paseando por las calles de la ciudad.

Carlitos Balá durante 65 años veraneó de manera interrumpida en Mar del Plata. Llegaba junto a su mujer, Marta, y sus hijos en enero y solía quedarse hasta mediados de marzo. Tenía su departamento en el edificio Havanna y pasaba gran parte de sus días en Playa Grande.

Carlitos Balá marcó toda una época del espectáculo para los niños y en cada verano elegía Mar del Plata como escenario de innumerables éxitos. En la icónica Carpa Multicolor, frente a la rambla Casino, encabezaba su tradicional show con la participación de malabaristas, equilibristas, patinadores, contorsionistas, juegos y entretenimientos.

En la ciudad, además de disfrutar de la playa y de la gente que se cruzaba por la calle y lo paraba para salulardo, pedirle una foto o un autógrafo, Carlitos fue parte de la cartelera de espectáculos durante muchos años.

Durante el verano de 2020 en Mar del Plata, durante una entrevista con la agencia Télam, Balá contó: “Me encanta esta ciudad, vengo en enero y me voy a mediados de marzo ya que me gusta más este calor que el que tengo que soportar en Buenos Aires. Antes venía manejando el auto pero ahora que lo tengo en venta me traen mis hijos o nietos, ellos también aman Mar del Plata porque desde chicos los traje mientras yo trabajaba”.

Cuando bajaba a la playa, el afecto de la gente seguía inalterable y nadie se resistía a la infaltable selfie en la que él. En ese sentido, contaba: “Tengo una rutina sin obligaciones, siempre bajamos a la playa cerca del mediodía junto a mi Marta querida con quien estoy casado hace 57 años, paseamos por la arena, nos mojamos los pies en el mar, charlamos con la gente que nos dice cosas hermosas, te invitan un mate, te recuerdan situaciones de sus infancias y esa es la gratificación más grande que me llevo. Luego almuerzo algo rico acá en los restaurantes y me vuelvo a mi departamento que tengo en el edificio Havanna, que es el más alto de la ciudad”.



Carlitos con un grupo de niños en playa Las Toscas. Foto de Familia | LA CAPITAL.

Carlitos con un grupo de niños en playa Las Toscas. Foto de Familia | LA CAPITAL.



También disfrutó de las bondades de la gastronomía de Mar del Plata: Adoro los mariscos y aprovecho cuando vengo para hacerme una buena panzada y comer comida fresca del puerto y algún que otro dulce”.