Mujeres y venta de droga: el delito que cometen desde el hogar
En lo que va del año, 45 mujeres fueron detenidas por causas de drogas. En los casos el perfil se repite: vulnerabilidad, pobreza y un impuesto por cuestiones culturales.
En lo que va del 2022, la Fiscalía Especializada en Estupefacientes imputó a 122 personas en causas por drogas, de las cuales 45 son mujeres, lo que indica el protagonismo que tienen en el submundo del narcomenudo.
A principios de agosto, la policía detuvo a “Tormenta”, una mujer de 35 años que vendía cocaína en su casa de la Villa Vértiz, donde además vivía con sus pequeños hijos. Cuando la policía irrumpió en el lugar se encontró que la líder del point era, además, la “ama de casa” del lugar: comercializaba droga mientras cuidaba a sus hijos, una historia que se repite en este tipo de causas.
Según explicó el fiscal de la unidad de Estupefacientes, Leandro Favaro, cada vez son más las mujeres que en Mar del Plata son detenidos por causas de venta de droga. En este 2022 ya fueron detenidas 122 personas, de las cuales el 38% fueron mujeres, una proporción que no se ve en otras jurisdicciones.
Además, según un informe del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, casi el 50% de las mujeres que son detenidas o imputadas son por causas vinculadas a la venta de drogas.
“En su mayoría son mujeres que se encuentran en un estado de vulnerabilidad y en una situación económica muy pobre, que además están arraigadas a trabajos del hogar impuestos por cuestiones culturales”, explicó Favaro y agregó: “Esto hace que la venta de droga se vuelva un delito que pueden cometer desde el propio domicilio, mientras atienden cuestiones cotidianas de la casa, a partir de esos roles culturales que se les asigna a las mujeres”.
“La situación es alarmante y nunca ha parado de crecer. Ni el consumo de estupefaciente ni la venta. Con esta variable, nunca han parado de crecer las mujeres que terminan detenidas por este delito”, dijo el fiscal de la Unidad Especializada en Estupefacientes.
Favaro, además, marcó una notable diferencia entre los hombres y mujeres que cometen delitos relacionados con las drogas y es el factor del consumo problemático de droga. El fiscal dijo que en los hombres se ven casos que comienzan a vender drogas justamente para poder pagar su consumo, y en estas circunstancias hasta pueden estar ligados a delitos violentos. En las mujeres, generalmente, cometen el delito desde la casa para poder mantener el hogar.
Por otra parte, lo que sí han notado desde la Fiscalía Especializada en Estupefaciente es el aumento de la violencia vinculado a la venta y al consumo de droga. “No tenemos en Mar del Plata disputas territoriales, pero sí ha crecido la violencia”, remarcó el fiscal.
Por citar un ejemplo de este año, se puede mencionar el crimen de Víctor “Chile” Vercelli, asesinado a principios de año en un point del barrio Parque Palermo, al que había ido junto a su hermana y un amigo.
Allanamiento a un point de droga.
¿Domiciliaria a quien vende droga en su domicilio?
En julio, una mujer de 62 años que tenía arresto domiciliario por vender cocaína y le habían colocado una tobillera electrónica fue detenida por, justamente, vender droga desde su domicilio en Rafael del Riego al 2500.
Esta situación no es nueva: personas detenidas por cometer un delito en su casa reciben el beneficio del arresto domiciliario y, para sorpresa de nadie, vuelven a cometer ese mismo delito desde su casa.
“Cuando existen las condiciones objetivas de otorgar una prisión domiciliaria la otorgamos, pero nos oponemos a que sea en el mismo domicilio en donde se realizó el delito, donde vendía la droga”, explicó Favaro.
“Esta objeción es avalada por todas las Cámaras de Mar del Plata”, remarcó Favaro y agregó: “De lo que se ha visto, se ve y lo que puede pasar es que cuando una persona que está imputada por venta de estupefacientes vuelve al mismo domicilio, el circuito que se había roto, que se había desbaratado tras el allanamiento y la detención, vuelve a reactivarse”.
Ante esta situación es que exigen que la imputada pueda presentar otra vivienda para cumplir con el arresto domiciliario, algo que, en estas condiciones de vulnerabilidad socioeconómica que se repiten en cada caso, no suele ser siempre posible.
Secuestro en una causa por drogas.
Droga y pandemia
La semana pasada, el Tribunal Oral en lo Criminal N° 2 condenó a un hombre, su hijo la novia de éste por venta de drogas y el abogado defensor intentó justificar el delito “por la situación económica surgida de la pandemia”.
“Podemos deducir que se ha agravado en pandemia el consumo y la venta de droga. Se puede analizar sociológicamente, pero otra cosa es considerarlo como un agravante o atenuante en la ley penal”, consideró Favaro.
En el juicio abreviado, el abogado Cristian Peláez había intentado justificar el delito por la crisis generada durante la pandemia, por lo que a su entender correspondería considerarlo como un atenuante. El hecho atribuido a sus asistidos fue cometido en contexto de plena pandemia, donde lamentablemente muchas familias se vieron necesitadas de recurrir a actividades no lícitas para su sustento económico, casi como salida laboral”.
El planteo no tuvo lugar y fue rechazado por el juez Roberto Falcone al entender que “no puede avalarse una conducta ilícita bajo el contexto aludido”.
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