Arturo Martín Batista, el joven de 19 años que en mayo del año pasado causó el choque en el que murió el comerciante Rodolfo Luis Goyoaga (62), será juzgado por el Tribunal Oral Nº 2.
Los magistrados que estarán a cargo del resonante caso serán Jorge Peralta, Alfredo De Leonardis y Gustavo Fissore. El joven está imputado por el delito de “homicidio doloso”, que prevé una peña de 8 a 25 años de prisión, por el hecho ocurrido el 23 de mayo del año pasado.
Esa mañana, Goyoaga circulaba por la calle Matheu a velocidad moderada. Iba a bordo de su automóvil marca Volkswagen Bora a iniciar una nueva jornada de trabajo, tanto en el kiosco de diarios y revistas de Juan B. Justo y Córdoba, como en la ferretería de Juan B. Justo y Gianelli.
Al producirse el choque, Goyoaga murió en el acto. En tanto, Batista sólo sufrió lesiones leves, por lo que luego, al comprobarse que conducía alcoholizado y sin licencia, quedó detenido en la Unidad Penitenciaria Nº 44 de Batán.
Para el fiscal de Delitos Culposos, Pablo Cistoldi, el joven actuó con impericia, porque sabía que ponía en riesgo al prójimo, lo cual configura el “dolo eventual” que implicó días después de la muerte de Goyoaga el cambio de carátula del caso de “homicidio culposo agravado” a “homicidio simple”.
Tras el hecho, el imputado se negó a declarar y quedó detenido, hasta que la Justicia de Garantías le concedió el arresto domiciliario en agosto de 2015.

El choque

El choque en el que murió el reconocido comerciante Rodolfo Goyoaga se produjo el sábado 23 de mayo a la madrugada en la esquina de Matheu y Las Heras.
Cerca de las 5.30, el automóvil marca Volkswagen Gol conducido por Batista y el Volkswagen Bora en el que viajaba Goyoaga colisionaron violentamente. Producto del fuerte impacto, el conductor mayor sufrió graves heridas y falleció casi en el acto. En tanto, el joven fue internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) con lesiones leves y luego recibió el alta médica debido a que se encontraba fuera de peligro.
Fue tal la violencia del impacto que el Bora se incrustó contra una casa, mientras que el Gol quedó volcado sobre Las Heras. Tras abandonar el HIGA, el acusado fue conducido a la Unidad Penitenciaria Nº 44 de Batán.