Fernando Telpuk, ex secretario de Seguridad municipal, contó que Carlos Arroyo le solicitó cuando era intendente si le podía enviar móviles de la Policía Local para custodiar el casamiento de su hija, a lo que el entonces funcionario se negó, ya que se trataba de una fiesta privada.

Los dichos de Telpuk se dieron en el marco de una entrevista radial en la que se le consultó su opinión acerca de la presencia de una patrulla municipal en el cumpleaños del polémico empresario Mauricio Ríos, la cual culminó con el asesinato de Maximiliano Rihl.

“No es común que empleados municipales estén cuidando una fiesta privada. Si es un evento privado, corresponde que se contrate seguridad privada y no que sea el Estado quien la brinde”, manifestó el ex secretario de Seguridad en diálogo con Vencedores y Vencidos.

“Si hubiese algún interés público con ese evento, se puede llegar a justificar”, añadió Telpuk, pero aclaró que “de alguna manera u otra, si hay un móvil que se desplaza a un lugar, eso tiene que estar refrendado en una orden de servicio”.

“Los móviles no pueden andar libremente o porque se le ocurre a alguien ir para allá o para acá. Tiene que haber una valoración del evento, tiene que haber una orden de servicio que diga ‘tal día y a tal hora va a haber un móvil en ese lugar’, tienen que estar identificadas las personas que van a estar ahí y esencialmente una orden de servicio tiene que constar para qué van a estar ahí, cuál es su función, cuál es el riesgo que van a atender”, explicó el también ex secretario de Seguridad de la gestión de Gustavo Pulti.

En este marco, a modo de “anécdota”, ejemplificó: “Cuando estaba con el doctor Arroyo, se casaba la hija y él me pidió si podía mandar móviles de la Policía Local al casamiento y yo le dije que no, porque era un evento privado y a eso tenía que ir seguridad privada”.

“Por eso no fueron móviles, porque yo entendía que la Policía Local tenía que estar para cuidar a todos los vecinos, no a un evento particular. Hay que entender que la cosa pública es de todos y no de un funcionario de turno”, enfatizó.

Volviendo al caso de la patrulla municipal en el cumpleaños de Ríos, Telpuk consideró que “alguien tiene que dar explicaciones” y sostuvo que “la falta de claridad en los funcionarios públicos genera una serie de sombras y elucubraciones que a veces son desacertadas”.

“Si el órgano responsable, llámese secretaría de Seguridad, secretaría de Gobierno o el intendente mismo, dice ‘pasó esto’, todos dejamos de tener hipótesis, pero cuando las explicaciones parecen más tendientes a encubrir situaciones que a aclarar las situaciones, ahí se complica”, señaló.

Por último, y ante la consulta acerca de la versión que señala que en la fiesta de Ríos se encontraban familiares del subsecretario de Seguridad, Gustavo Jara, Telpuk respondió: “No es un delito que alguien esté en una fiesta. El problema es qué hacés una vez que pasó ese acontecimiento”.

“Yo no sé quién estuvo en la fiesta, lo que yo sé es que ahí hubo un homicidio, había referentes de la secretaría de Seguridad en el lugar y el homicida fue detenido cuando se presentó en Tucumán. Hasta Tucumán no lo pudo parar ni la Policía ni la Patrulla Municipal, ni lo vio ninguna cámara detectora de patentes”, destacó y agregó que hubo “un montón de recursos, un montón de dinero que se supone que está el servicio de evitar esta situaciones y esto no pasó”.

Para concluir, Telpuk reflexionó que “todo lo que había fue ineficiente, con el agravante de que quien huía pasó por delante de un móvil de la Patrulla Municipal”. “Hay que exigir que se aclare lo que pasó y hay que exigir eficiencia”, concluyó.