Por fin se le dio a Francisco Comesaña. El tenista marplatense venía coqueteando con un título a lo largo de todo este año. Y en su séptima final profesional, lo consiguió. Este domingo superó en la definición del torneo ITF M25 de Villa Allende, en Córdoba, a Juan Pablo Paz, por 7-6 (7-4) y 7-6 (7-5) y se coronó por primera vez.

Ubicado en el puesto 485° en el ranking mundial de la ATP al iniciarse este certamen (sobre polvo de ladrillo y con 25.000 dólares en premios), partía como tercer favorito. Superó a un rival de similar rendimiento, ya que Paz ostentaba el puesto 480° en el escalafón internacional y era el segundo preclasificado.

Con esta actuación, el maplatense, orientado por el cordobés Facundo Argüello, trepará hasta el puesto 475° . El mejor de su carrera. Un excelente cierre de año para el pibe de Punta Mogotes, que en mayo pasado, cuando decidió ir a probar suerte en Turquía, en una serie de torneos M15, tras recuperarse de una lesión, figuraba 772° en el ranking mundial. Merecido premio por sobreponerse a todos los obstáculos y seguir centrado en sus objetivos.

Luego de imponerse a Paz en la final, en el Deep Espacio cordobés, le dijo al departamento de prensa del certamen: “El 7 es mi número de la suerte. Ya nos sacamos de encima la mufa por haber perdido seis finales. Estoy muy contento de que haya llegado el primer título. Se lo quiero dedicar principalmente a toda mi familia. Hace muchísimo tiempo que no los veo, no voy a casa desde hace ocho meses y me gustaría poder compartir esto con ellos ahora. Sé que me están mirando. Me ayudan muchísimo en el día a día, me apoyan, me bancan siempre. Y por supuesto, agradecer a todo mi equipo. Facundo (Argüello) se porta un fenómeno conmigo. Me trata como un hermano, hijo, amigo, todo. Le debo la vida a él y a todo mi equipo“.