Faltaban 300 metros para que un marplatense de 56 años complete los 10 Km en el Medio Maratón de Mar del Plata. Su esposa, participaba en la distancia de 5 Km y venía más atrás. Pero el objetivo por el que se había preparado no se pudo cumplir, aunque al final de cuentas eso terminaría siendo una anécdota: el hombre se descompensó y cayó sobre el asfalto a la altura del Casino Central.

Cerca de la línea de llegada se encontraba el titular del SAME en Mar del Plata Juan Di Mateo quien escuchó los gritos que pedían asistencia y fue corriendo: en menos de un minuto le empezó a realizar RCP y el hombre se salvó.

A esa altura, alrededor de las 9, gran parte de la carrera había transcurrido y para Di Mateo y el resto del equipo médico no se habían presentado grandes incidentes. Sólo algunos cuadros de deshidratación o calambres propios de una competencia exigente. Pero los gritos de auxilio cambiaron todo.

Juan Di Mateo, titular del SAME local.

“Empecé a escuchar que pedían asistencia, fui corriendo y me encontré con la persona que estaba haciendo un paro”, revivió Di Mateo con LA CAPITAL, horas después.

El hombre presentaba todos los signos de un paro cardíaco: no tenía pulso, ni respiraba.

“Le empecé a hacer las maniobras de RCP, se activó el sistema de emergencias y enseguida llegó una ambulancia. Con las maniobras y el desfibrilador se pudo revertir el cuadro”, relató.

Antes de subirlo al ambulancia, el hombre estaba en ritmo cardíaco y empezó a hacer algunos movimientos lo que dio cierta tranquilidad. No obstante, la situación de alerta se mantuvo porque, según los especialistas, el paro cardíaco se podía repetir.

El alivio llegó dos horas después a través de un llamado al Hospital Interzonal. “Nos dijeron que estaba bien, que había hablado con la esposa y eso fue una gran alegría. Es la satisfacción de saber que el trabajo realizado dio sus frutos”, explicó el profesional y añadió que en muchas oportunidades, los resultados no son favorables.

Poco después, el hombre fue trasladado a una clínica privada donde se seguirá su evolución en los próximos días.
Con la satisfacción del deber cumplido, Di Mateo se corrió del lugar protagónico y destacó que lo importante es “el trabajo en equipo”.

“Yo llegué primero porque estaba cerca. Pero hay que resaltar el trabajo de toda la organización. En menos de tres minutos llegó el desfibrilador”, contó.