Filmes de Georgia y Suiza entran en la Competencia Internacional
En la agenda de este lunes también continúan las competencias Latinoamericana y Argentina, con De todas las cosas que se han de saber, Camila saldrá esta noche, Metok y Noh.
Continúan las competencias en el marco del 36° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y este lunes llegan a la pantalla películas de Georgia y Suiza que se suman a la competencia internacional. Además continúa el certamen en las categorías Latinoamericana y Argentina.
Competencia internacional
¿Qué vemos cuando miramos el cielo? de Alexandre Koberidze (Georgia), se exhibirá a las 12 en el Auditorium.
La historia de amor maldita en la forma de un cuento de hadas es el eje narrativo de una película que encuentra en sus fugas imprevisibles su sentido poético. Además de la pareja trunca, hay perros fanáticos del fútbol que se citan en bares para ver los partidos de un Mundial que en realidad nunca existió, mientras una dupla de cineastas realiza un casting de posibles parejas para una película sobre el amor. Suena extraño y fantástico, y lo es. También es una fábula humanista que demuestra que el cine, a veces, tiene el poder de mejorar la vida.
La niña y la araña, de Silvan Zürcher y Ramon Zürcher (Suiza), se proyectará a las 15.30 en el Auditorium.
A través de un trabajo riguroso con el encuadre y el montaje, el director suizo construye una coreografía de miradas y cuerpos en la que Mara, Lisa y su madre, los encargados de la mudanza, los vecinos y hasta un perro que resiste el caos general se cruzan y se miden, mientras alguien toca en un piano una versión lenta y melancólica de “Voyage, Voyage”. Con su virtuosismo silencioso, The Girl and the Spider demuestra que no hacen falta demasiado espacio ni mucho tiempo para que aquellas cosas que parecen estar en su lugar puedan detonar, con apenas un gesto, de un momento a otro.
Competencia Latinoamericana
De todas las cosas que se han de saber, de Sofía Velázquez Nuñez (Perú), entra en competencia a las 11.30, en el Paseo Aldrey.
Un grupo de directores arriba al pueblo natal del poeta César Vallejo, ubicado en la sierra peruana, para retratar y conocer a sus habitantes, quienes leen e interpretan a su coterráneo más célebre. De todas las cosas que se han de saber es, sobre todo, un tributo vivo y sentido a uno de los autores latinoamericanos más importantes del siglo XX a 83 años de su fallecimiento.
Camila saldrá esta noche, de Inés Barrionuevo (Argentina), se exhibe a las 14.30, en el Paseo Aldrey.
Camila, una joven platense que se muda a la ciudad de Buenos Aires junto a su familia cuando su abuela enferma gravemente, no solo se ve obligada a habitar un espacio que le es ajeno, sino que debe acatar los mandatos de un colegio religioso y relacionarse con sus compañeros. Su avasallante personalidad y su militancia feminista comenzarán a chocar con este nuevo presente que debe transitar. Inés Barrionuevo vuelve a hacer de la adolescencia el escenario ideal para su cine.
Competencia Argentina
Metok, de Martín Solá, se proyecta a las 11 en el Paseo Aldrey.
El viaje de regreso al hogar es uno de los relatos más recurrentes desde que la humanidad empezó a contar historias. Y es que la vuelta al origen siempre tiene que ver con la identidad, un dilema que nunca deja de interpelarnos. Con Metok, Martín Solá cierra su trilogía dedicada a territorios en conflicto –que lo llevó a Palestina en Hamdan (2013) y a Chechenia en La familia chechena (2015)– acompañando el periplo de una joven monja budista que dejó a su familia para formarse en la India, y ahora busca volver al Tíbet para atender un parto en su pueblo y reencontrarse con los suyos. Pero ¿qué pasa cuando el camino hacia la tierra que nos vio nacer nos es vedado?
Noh, de Marco Canale, Juan Fernández Gebauer e Ignacio Ragone, llega a las 14, al Paseo Aldrey.
Cuenta la vida de Chiyoko, una viuda que intenta salvar su teatro noh –un arte dramático basado en historias de espíritus que rondan por otros mundos– mientras participa activamente de la obra del director argentino. Entre ensayos y representaciones, conoce a una compañera y emprende un viaje para encontrar la zona donde nació, siglos atrás, esa ancestral práctica. El resultado es una película que deambula entre el documental y la ficción, entre Oriente y Occidente y, al igual que su pieza central, entre los vivos y los muertos.