Jorge Laureti, uno de los grandes constructores del Teatro Marplatense
Una semblanza de Juan Carlos Vitiello.
Jorge Laureti marcó un antes y un después para el teatro de la ciudad de Mar del Plata, como uno de los referentes de vanguardia por su labor, desde fines de 1950 con casi noventa puestas teatrales como actor y director.
Nació en enero de 1938 en un hogar de trabajadores ítalo argentinos provenientes de Spoleto, Rímini y Tropea.
Completó sus estudios secundarios en una Escuela de Educación Técnica de la ciudad.
Desde su juventud fue peronista y con mucho compromiso y militancia allá por los 50s.
A los 17 fue a ver una obra de teatro por primera vez y así,“ el hasta ahí muchacho sencillo que gastaba sus horas con el taco de billar vislumbró un largo y muy difícil camino” especialmente en sus comienzos, pero que muchos años después trajo sus frutos.
Se inició allá por 1950 en el por aquí considerado legendario Teatro Escuela ABC de Mar del Plata.
Para poder salir adelante, su fuente de ingresos fue en la construcción, pero nunca se alejó del Teatro, su gran vocación y donde tuvo la posibilidad de seguir “construyendo” a favor de la Cultura local.
A fines de los sesenta se instaló por un tiempo en Buenos Aires y se formó junto a Martín Adjemián. Más adelante integró la comedia Municipal Marplatense y siguió cursos con grandes actores del momento, como Alberto Ure, HedyCrilla, Agustín Alezzo y otros.
A él siempre le interesó el Teatro que supone un compromiso social. Entre sus primera presentaciones nos encontramos con obras de distinguidos autores nacionales como Armando y Enrique Santos Discépolo, Carlos Somigliana, Juan Carlos Gené, Griselda Gambaro, LeonidasLamborghini y RicardoMonti, entre otros.
A mediados de los setenta, Laureti llevó su Proyecto teatral a la Facultad de Humanidades de la Universidad para “dar a luz a “La Manija” que arrancó con “El Organito” de Armando Discépolo.
Contaba con las tres herramientas expresivas que debe tener todo actor, cuerpo, sensibilidad e inteligencia. Era un gran lector y supo amalgamar lo intelectual con lo práctico en las puestas en escena tanto en lo actoral como en cuestiones de iluminación y escenografía.
En la temporada de verano 1985/1986 obtuvo el reconocimiento con nominaciones y premios “Estrella de Mar” en varios rubros con la obra Marathon de Ricardo Monti ,sin contar con los medios ni la producción de las obras que venían de Buenos Aires.
Fue conductor del grupo teatral “Marathon” y del “Creatorio- Hora Cero”.
Por sus antecedentes y trayectoria, fue contratado por parte de La Comedia Teatral de la Provincia de Buenos Aires, con sede en la ciudad de La Plata para dirigir la obra “Hoy debuta la Finada”, pieza grotesca de Patricia Marta Zángaro. Con la que además de lucirse, le brindó la posibilidad de desarrollarse fuera de los límites de la ciudad.
Tiempo después firmó un contrato con la Subsecretaría de la Provincia de Buenos Aires, para dirigir un taller de formación y perfeccionamiento para directores teatrales.
En los´90 fundó una Biblioteca móvil para llevar libros a los barrios carenciados de la ciudad.
Se llamaba “La Barraca, y era un colectivo de pasajeros adaptado para dicha función.
Por entonces ya ejercía como Director de Cultura de la Municipalidad de General Pueyrredóny Director de la Biblioteca Municipal.
En 1994 ganó el Premio José Maria Vilches por su dirección en “EL HERRERO Y EL DIABLO” de Juan Carlos Gené.
Jorge Laureti “laureado una vez más” en esta edición anual con la obra de teatro que durante la temporada más se destacó por rescatar la dignidad humana y los valores sociales y por contribuir a la prédica de la libertad y de la paz.
Un amigo de la infancia, lo rememoró diciendo la frase de un tango “No habrá ninguno igual”, afirmó. “Construía techos, con brea y luego actuaba en el teatro” .Se puede decir que tanto en su trabajo como en su vocación estuvo bien alto..
Falleció en enero de 1998 ,días antes de cumplir 60 años y pese a una cruel enfermedad, Laureti seguía siendo un hombre apasionado, lleno de proyectos y de cruzadas solidarias.
Los actores marplatenses de antes, de ahora y de siempre debemos seguir esa huella.
Jorge vivía en dos mundos, en dos tipos de obras, las del cemento y ladrillo y las que representó y dirigió con pasión y compromiso.
Se van a cumplir 23 años de que el teatro marplatense perdió a uno de sus genuinos cultores, en fin, todo un baluarte de la cultura local.
Respondió a su vida de tipo gregario, afectuoso y sincero. Fue un hombre corajudo , sensible, generoso, talentoso, multifacético, resumiendo, un gran tipo. Orgulloso de lo que había hecho y construído junto a sus colegas y con al apoyo incondicional de amigos incondicionales como Jorge, Antonio y con Nora, su compañera de vida con sus hijos.
En honor a su trayectoria, en el año 2002, se inauguró una Sala con su nombre, con capacidad para 100 personas. La misma está ubicada en el Centro Comercial del Puerto (local 9, zona de restaurantes) y cuenta con una antesala o hall para exposiciones. Además de albergar espectáculos y conferencias, es un espacio dedicado a brindar información cultural en un lugar turístico.
Relato construido en base a datos de archivo del diario El Atlántico, La Capital y La Razón con aportes y correcciones de su esposa Nora.