El mundo Alvarado podría tener una noticia “bomba” en los próximos días. Facundo Moyano, históricamente vinculado al club, tiene ganas de volver a la presidencia, para encabezar un proyecto todavía más ambicioso en lo deportivo e institucional.

El dirigente siempre acompañó y apoyó al club de Jara y Peña. Incluso ya ocupó la presidencia, entre 2012 y 2013, cuando debió dar un paso al costado para dedicarle más tiempo a sus ocupaciones políticas y gremiales.

Poco después de renunciar a la banca de diputado nacional, Moyano está dispuesto a volver a ser la cabeza de Alvarado, según pudo averiguar LA CAPITAL. Entusiasmado por el crecimiento del club en los últimos años y con la idea de darle otro empujón para ser protagonista en la Primera Nacional.

Según fuentes muy cercanas, Moyano se reunió en las últimas horas con el actual presidente, Wenceslao Méndez, para planificar a futuro. Su intención es conformar un equipo competitivo y “jugar para ascender”, con la intención de “devolverle a los marplatenses el clásico” entre Aldosivi y Alvarado.

Además, en los próximos días el propio Moyano anunciaría más obras para la institución.

Lógicamente, en Alvarado lo reciben con los brazos abiertos. Aunque en las próximas horas se trabajará para concretarlo formalmente. En la nueva estructura, “Wenchy” Méndez quedaría a cargo del fútbol profesional y las relaciones institucionales.

Claro que todo será tratado en comisión directiva e, incluso, se podría llegar a convocar una asamblea de socios para materializar esta idea.

Más allá de los posibles cambios dirigenciales, hay unanimidad en Alvarado para retener al entrenador Gastón Coyette, pretendido por varios clubes de la categoría.

El DT está ilusionado con seguir con el proyecto que inició un año atrás, pero para eso pedirá algunas inversiones que puedan mejorar la estructura, su gran obsesión. La llegada de Moyano, lógicamente, sería importante para cumplirle los deseos.

Lo cierto es que se vienen días movidos en Alvarado, que después de afianzarse en la segunda división del fútbol argentino, se plantea desafíos todavía más ambiciosos a futuro.