Por Marcelo Solari

 
La buena performance de Peñarol en el Torneo Súper 20 fue relativizada por el entrenador Leandro Ramella en la previa del debut de su equipo en la Liga Nacional de Básquetbol, este miércoles, desde las 21, ante Oberá Tenis Club, en el Polideportivo “Islas Malvinas”. Así analizó la actualidad del “milrayitas” con LA CAPITAL:

-¿Qué significa poder volver a jugar en casa y con sus hinchas en el estadio?
-La verdad es que, lo digo en general, para el deporte y no quiero sonar filosófico. Pero los jugadores son los protagonistas de un evento. Y lo más lindo para los que nos gusta el deporte es poder verlo en vivo. A mí me gusta ver muchos deportes. Y lo mejor es verlos en vivo. Se trata de un espectáculo. Lo entendamos o no, es un espectáculo deportivo. Y lo lindo es que la gente te venga a ver. Por eso es tan bueno cuando las canchas están llenas. A mí me pone muy contento que se pueda volver a tener público en la cancha. Creo que mañana -por este miércoles- va a venir mucha gente. Ojalá que así sea. Que la gente tenga ganas de venir y que el equipo también contagie para que la gente vuelva.

-No había elección. Para la Liga pasada era volver sin público o no volver. Pero también para el jugador la gente representa un factor de motivación. No se puede comparar…
-No, definitivamente. Ya cuando jugamos en Ferro, por el Súper 20, había bastante gente. Y no se puede negar que la sensación es diferente. Ojalá que podamos hacer las cosas bien.

-¿Sirven como parámetro algunas conclusiones obtenidas en el Súper 20 de cara a la Liga Nacional?
-Me parece que esos datos que pudimos obtener no son parámetro, realmente. El Norte, por lo que se vio, está mucho más fuerte que el Sur. Es cierto que a Instituto, el campeón del Súper 20, le costó ganarle mucho a Obras. Y que a la final llegó un equipo del Sur, Gimnasia de Comodoro. Pero sigo pensando que no fue lo mismo el Súper 20 en el Norte que en el Sur. La diferencia en el nivel de juego fue notoria. Veremos cómo estamos parados con respecto a los equipos del Norte.

-De todas maneras, Peñarol mostró cosas positivas en el Súper 20 y estuvo muy cerca de clasificar para el octogonal final…

-Sí, creo que ganamos los partidos que teníamos que ganar. Y tuvimos dos juegos con malos cierres que nos costaron perderlos y, al mismo tiempo, no clasificarnos. Con Ferro cerramos muy mal y con Platense, mal. El objetivo principal no era la clasificación al Final 8, pero esos cierres flojos nos costaron la posibilidad de haber ganado otros dos partidos. Nos quedó la sensación de que el equipo fue competitivo y se plantó siempre, salvo contra Boca. Más allá del resultado final, durante tres cuartos, no competimos. El resto del torneo me parece que fue bueno.

-¿La llegada de Tevin Glass ha potenciado al equipo?
-Sí, es un jugador más, que nos agranda la rotación. Espero que él pueda adaptarse e incorporarse al juego. Lo peor que nos puede pasar es que vengan extranjeros que piensen que son ellos los que tienen que llevar adelante al equipo. Y con el nivel de extranjeros que tenemos hoy en la Liga, no tendría que pasar eso. Y ellos tampoco deberían sentir esa presión u obligación. Al Thornton lo ha entendido porque es demasiado inteligente. Esperamos que Tevin Glass entienda lo mismo.

-¿Qué saben de Oberá Tenis Club? Ganó un solo partido pero estuvo siempre con chances de ganar en casi todos sus compromisos…
-Fue muy competitivo y en un contexto de otro nivel, más alto. Oberá fue uno de los primeros equipos que se armó y lo hizo con muy buenas fichas, muchas de las cuales las hubiera querido tener cualquier otro equipo. Utilizó el Súper 20 para descubrir algunas falencias e hizo algunos cambios, como traer un extranjero que necesitaba en el perímetro (Melvin Tyriek Johnson, un ex Peñarol), y todavía le queda libre una ficha más. Me parece un equipo muy competitivo, muy duro, con dos fichas como Nicolás De los Santos y Facundo Giorgi que todos querían tener.

-¿Dónde habrá que enfocarse, según la planificación?
-Ellos anotan mucho por ataque rápido. Por lo menos lo hicieron en el Súper 20, y son muy fuertes en el perímetro. Tienen muchos puntos allí, más ahora con la llegada de Melvin. Y a partir de ahí se le generan espacios a Clint Robinson. Hay que tratar de frenar eso. Y Giorgi es un jugador que a mí me gusta mucho, es muy inteligente para saber si tiene que tomar protagonismo o no, es polifuncional y por todo eso, son los jugadores más difíciles de “setear”, y por eso nos gustan tanto a los entrenadores.

-¿Qué fue lo que más te gustó y lo que menos te gustó del equipo en el Súper 20?
-Lo que más me gustó fue la personalidad que tuvo el equipo a lo largo de todo el torneo. Siempre salió a jugar todos los partidos bien plantado en la cancha y siempre pensamos que podíamos ganar los juegos. Eso lo hizo el equipo, los jugadores. Y no me gustó mucho nuestra defensa. Recibimos muchos puntos, nos faltó ser más agresivos. Por las características individuales de los jugadores, no sé si voy a poder lograr lo que realmente me gusta defensivamente, pero sí tenemos margen para mejorar en ese aspecto.