Martín Uría lanzó su disco “En el mar de los náufragos” en formato audiovisual
"Es la historia del ser humano migrante, aventurero, viajero inquieto y conquistador curioso incansable que, sin embargo, se pierde en su propio laberinto de destrucción, soledad y egoísmo, que naufraga y debe recordar sus orígenes y revalorizar su esencia para sobrevivir como especie colectiva". Accedé al enlace para seguir en vivo el estreno.
“Nació como un audiovisual”, asegura Martín Uría sobre “En el mar de los náufragos”, este trabajo discográfico y película que, tras los adelantos de “Hada” y de “Una canción de Amor”, se estrenó este domingo 10 de octubre en el canal de Youtube del músico.
“Es la historia del ser humano migrante, aventurero, viajero inquieto y conquistador curioso incansable que, sin embargo, se pierde en su propio laberinto de destrucción, soledad y egoísmo, que naufraga y debe recordar sus orígenes y revalorizar su esencia para sobrevivir como especie colectiva” define Uría a este material en una charla con LA CAPITAL en la que también desgrana cada parte del proceso creativo y su realización.
– ¿Cómo pensaste y fuiste desarrollando el concepto del disco En el Mar de los Náufragos?
“En el mar de los náufragos” nace en un punto del dolor y del sufrimiento, relacionándose con la soledad, el propio naufragio y los laberintos de la mente, pero mucho más y sobretodo nace del amor, de la capacidad de salvación y sanación que tiene el amor, y de la búsqueda de espiritualidad y trascendencia que tenemos como seres humanos. “En el mar…” es un naufragio individual, pero también social, habla del naufragio del ser humano como sociedad y civilización, parte de su crisis, y de la necesidad de sobrevivir ante esto. Pero no sólo de supervivencia se trata, sino de vivir, de buscar una nueva relación con el otro y con la naturaleza que nos rodea. En este sentido, “En el mar…” es un grito de humanidad, humanista, que parte de una profunda introspección e indaga al sujeto ser humano, más allá de regiones, países, credos y clases sociales. Es un canto de amor, el que tenemos para dar o el que nos falta y necesitamos. ¿Qué nos puede salvar y redimir como seres individuales y sociales? Ante todo preguntarnos quiénes somos y queremos o buscamos ser. “En el mar…” a través de las canciones y las imágenes plantea un montón de preguntas. ¿Por qué nos sentimos solos en un mar de gente alrededor? ¿Hay un destino que conspira o somos capaces de trazarlo propiamente? ¿Acaso sólo buscamos amor? ¿Tenemos de todo y nos falta amor? ¿Por qué nos sentimos tan angustiados, y vacíos, teniendo tantos valores humanos, una mente curiosa e inteligente, y una gran consciencia y espíritu? ¿Por qué elegimos destruir tanta belleza natural que hay a nuestro alrededor sólo para satisfacer una ambición irracional y sin sentido? ¿Por qué anhelamos viajar a las estrellas y arruinamos nuestra existencia terrestre?
– ¿Desde el principio supiste que ibas a presentarlo en formato audiovisual, como “una película”?
– Sí, “En el mar…” nace ya como una película en mi mente, en una selección de canciones compuestas que no sólo integraban un par de conceptos sino que iban a narrar una historia, personal y humana. Era la historia del ser humano migrante, aventurero, viajero inquieto y conquistador curioso incansable, que sin embargo, se pierde en su propio laberinto de destrucción, soledad, y egoísmo, que naufraga, y debe recordar sus orígenes y revalorizar su esencia para sobrevivir como especie colectiva. Lo que no sabía bien, más por recursos que por ideas, era cómo iba a producir ese Audiovisual.
-¿Cómo plasmaste la mirada humanista, el énfasis en sentimientos y sensaciones -amor, soledad, incertidumbre, sueños- y esa combinación de temáticas tan individuales y que se resignifican en la mirada colectiva?
– Una vez que reuní y grabé las 9 canciones, las puse en secuencia para desarrollar una Historia que se resignifique en lo social y humano. Y ahí surge la “película”: Un viajero naufraga con toda una historia detrás, que lleva en su mochila, con recuerdos, sueños, alucinaciones, y valores, en un lugar que parece medio abandonado y deshabitado, y que comienza a transitar. A medida que camina, inspirado en el lugar que recorre, va recordando su historia, y se cruza con un par de habitantes del lugar, que le dan una nueva luz a su vida. En el Audiovisual, en realidad son protagonistas las Canciones con sus imágenes, y desde la lírica va mostrando y representando la metáfora del ser humano en su camino evolutivo, mirando siempre hacia las estrellas y olvidando o menospreciando a su hogar, la tierra, buscando avanzar en forma individual y egoísta, al tiempo que olvida su esencia social y sufre por soledad, vacío existencial o falta de amor.
¿Cómo influyó la pandemia en las temáticas que abordás, porque más allá de que este proceso profundizó la crisis social, en realidad, en muchos aspectos ya estaba presente mucho antes?
La verdad es que el Álbum ya estaba compuesto antes de que estallara la pandemia. En realidad, la pandemia vino como a resignificar y a señalar más puntillosamente la crisis del ser humano contemporáneo, de su sociedad y tipo de civilización. Los tópicos por los que transita el álbum “En el mar…”, el abandono, la soledad, el amor, la incertidumbre, la fe o creencias, los valores humanos esenciales, todos, adquirieron más luz o foco. No quiero decir que es un álbum premonitorio, porque ya vengo cantando sobre la crisis del ser humano y la crisis social-civilizatoria en mi anterior disco, que titulé “Futuro”(2018) y justamente hablaba de la falta de futuro o de un futuro incierto o eclipsado.
Martín Uría. Ph: Marcos Hugo Grassi.
– ¿Cuáles fueron los principales desafíos de encarar este proyecto de forma totalmente independiente?
El desafío siempre es grande, agotador, y doble, ya que no sólo es independiente, sino solista. No cuento con sponsors, ni sello discográfico, ni siquiera un mánager ni prensa, hago de todo. Tampoco he contado con ninguna ayuda estatal subsidiada, todo es autogestionado. Por eso, siempre el desafío es encarar un proyecto creativo propio que tenga como resultado un producto de cierta calidad. Porque hoy por hoy, cualquiera puede hacer uso de la tecnología para hacer por ejemplo un álbum de música. Pero de ahí a poder realizar una producción de calidad profesional hay un paso. Y ahí los recursos cuentan y mucho, técnicos, financieros, y creativos.
– A la hora de la práctica, cómo fue todo el proceso de grabación de los temas y los clips? ¿Contaste con ayuda?
– Todo ha sido muy a pulmón y contando con la solidaridad creativa de varios amigos que me bancan en este proceso. Por contar, gran parte del disco se grabó en formato homestudio, y el Audiovisual se realizó con una cámara. Todo depende del buen o mal uso que se le de. Como dije, en la actualidad se puede hacer buenas cosas con un par de recursos tecnológicos, por supuesto, depende también del tipo de música que encares, el mensaje y enfoque artístico, además de hasta dónde pensás llegar en producción y post-producción. Se tiende a pensar siempre que una cantidad ilimitada de recursos lleva a un producto de mejor calidad, pero no siempre es así: la historia está plagada de productos artesanales de excelente calidad técnica y artística, y de productos industriales de pésima calidad. Sí, creo que importa mucho optimizar al máximo tus recursos, tener tiempo y dedicación, pasión y compromiso con la obra que uno encara. El amor por el trabajo, un plan, un claro mensaje y enfoque artístico, puede hacer una gran diferencia aún contando con pocos recursos. Con esa gran pasión he producido íntegramente el álbum, desde la composición de música y letras hasta el Audiovisual con su guion y dirección, pasando por la producción de voces, guitarras, y sintetizadores. La mayor parte se grabó en mi pequeño homestudio. He contado con la gran ayuda en pre-producción y en producción de baterías electrónicas y acústicas de Nicolás Humeniuk. En la producción de bajos reales Maximiliano Castillo. En la Mezcla y Mastering el genio Daniel Susperreguy. En fotografía y arte de tapa, conté con el talento de Marcos Hugo Grassi y Daniela Tomé. Y en la producción de este tremendo laburo Audiovisual he contado con la cámara y edición de Adrián Díaz. Además, conté con la colaboración de Violeta De Lisi, Georgina De Lisi, Daniela Tomé, Laura Parra y Juan Demattei, en participaciones actorales.
– ¿Cómo pensás la movida y promoción de este nuevo álbum, su presentación en vivo?
Lo próximo y primero va a ser darlo a conocer al público en forma virtual, moverlo en todas las redes sociales, compartirlo digitalmente, darlo a conocer de a poco en la prensa. Luego, en unas semanas lo presentaré en todas las plataformas digitales en formato audio, y también a moverlo. Y por último, de a poco hacia el próximo verano, comenzaré a presentarlo en vivo, seguramente en forma acústica y en formato banda más adelante ya pensando en su presentación oficial en algún bello espacio. La idea es promocionarlo mucho, moverlo mucho, darlo a conocer con tiempo y dedicación, y presentarlo todo lo que sea posible de acá a un par de años.
Es un Álbum que me ha encantado realizar y realmente lo quiero mucho, y quiero defenderlo con todo, en todos lados a donde sea posible llegar.
“En el mar…” va a estar disponible en gran estreno este domingo 10/10 sólo el canal de Youtube/MartínUría a partir de las 18: